Entrevista a Noemí Levy Orlik/Profesora-investigadora de la Facultad de Economía de la UNAM
Nora Rodríguez Aceves
El sistema financiero mexicano es un sistema sujeto a alta corrupción, con reglas muy discrecionales y poco claras, muy proclive a todo tipo de fraudes, recordemos que el sistema financiero mexicano está dominado por bancos extranjeros, y con una regulación laxa tiene mayores posibilidades de actuar en los límites de la ley o al margen de ella.
Es increíble, pero en México los bancos hacen lo que quieren, lo que se les pega la gana y determinan sus propias reglas. “Hoy —18 de febrero— sale en La Jornada una noticia pavorosa, a una trabajadora de la Fundación UNAM le retuvieron nueve mil pesos de su salario porque Banamex creía que era lavado de dinero y a los que realmente lavan dinero no les hacen nada, por eso subsiste el narcotráfico.”
En ese sentido “hay una cantidad de prácticas por completo irregulares que explican de alguna manera que no hayan podido con el narcotráfico porque no se han dedicado realmente a limitar el lavado de dinero y hay prácticas muy claras de cómo se puede hacer; si uno escucha a los analistas, son muy claros los pasos que hay que seguir, pero no lo toman en cuenta porque no les convienen, porque es una vía de entrada de capital extranjero, entonces el sistema financiero mexicano dominado por banca extranjera con una laxa regulación estatal es muy proclive a los grandes fraudes”, señala Noemí Levy Orlik, profesora investigadora de la Facultad de Economía de la UNAM.
Luego de que la prensa internacional y nacional dieran a conocer que en la famosa y polémica lista Falciani, “como se conoce periodísticamente a la información de más de 130 mil supuestos evasores fiscales de varias nacionalidades que Hervé Falciani sustrajo de la filial suiza del banco HSBC”, hay alrededor de dos mil cuentas bancarias que pertenecen a personajes mexicanos.
Compañías fantasma
“No es de sorprenderse —expresa Noemí Levy a Siempre!—, bajo las condiciones actuales de la organización del sistema financiero, los bancos, a través de las innovaciones financieras buscando ingresos por comisiones, lo que hacen es crear cuentas offshore y crear compañías fantasma para que los agentes con grandes montos de dinero sujetos a pago de impuesto los puedan sacar, de hecho si uno se fija, no es muy penado o los gobiernos no buscan limitar estas prácticas.
“Esta historia que sale en 2008 a la luz, porque esto lo saca una persona que estaba dentro de HSBC y le entrega la información a Francia, la lista, y después Francia la empieza a compartir con otros países, van aproximadamente seis, siete, años de que esto sucedió, y salta a la luz ahorita porque no había gran intereses por parte de los gobiernos en normar estas prácticas, y las razones para no normarlas es que buscan atraer el máximo capital posible, reducir los impuestos, a fin de que venga el capital extranjero, ése sería el caso fundamental en México. De hecho, parece que en Suiza están diciendo que si no es lavado de dinero ellos no actuarán en contra, ¡es impresionante!, y están pidiendo la extradición de la persona que reveló los datos, a quien consideran un ladrón y no sé cuántas cosas más; el problema aquí es que culpan al que sacó la información y no a los que evaden la ley.”
De acurdo con lo publicado en diversos medios de comunicación electrónicos, impresos y en Internet, “el proyecto Swiss Leaks —filtraciones de Suiza— se basa en la sustracción de información del banco HSBC correspondiente a cuentas bancarias abiertas en Suiza hasta 2007; el personaje que robó los datos, Hervé Falciani, ahora se ha convertido en un colaborador del fisco francés…”
“La lista contiene más de 100 mil clientes de 203 países del mundo, cuyos depósitos suman alrededor de 102 mil millones de dólares.”
Sobre el asunto la también tutora del Posgrado en Economía, y miembro activo de Tutores de Doctorado del Programa de Posgrado de la Facultad de Contaduría y Administración de la UNAM, y medalla “Alfonso Caso” del Programa de Doctorado en Economía y reconocimiento “Al mérito universitario” por 25 años de labor académica, comenta que en este caso del Swiss Leaks “puede haber una combinación de muchas cosas. Una, evasión de impuestos, hay que recordar que en el caso del hermano de Salinas de Gortari, no quiero decir el nombre del banco, pero un banco norteamericano fue el que hizo toda la transacción hasta que llegó a Suiza, entonces no averigua mucho con los grandes clientes y simplemente traspasa a paraíso fiscal, y los gobiernos no se preocupan mucho en determinarlo porque lo que quieren es dar certeza al capital extranjero. También podemos estar hablando de lavado de dinero, uno de los grandes problemas. En México no han querido regular el lavado de dinero, dicen y dicen y dicen pero no han puesto ninguna medida que realmente tenga dientes para limitar el lavado de dinero y de esa forma parar estos grandes negocios del narcotráfico”.
Evasión de impuestos
Por lo tanto, “ésa es la historia o por lo menos lo que la prensa nacional e internacional está informando, que hay aparentemente —no sé si en el caso de México, pero a niveles internacionales—una mezcla de evasión de impuestos y de lavado de dinero que se facilita por todas estas compañías fantasma, las innovaciones financieras que se han generado, estos nuevos títulos, muy complicado, que han hecho para rastrear de dónde viene la información; realmente hay que tener la información desde dentro del banco para sacarla, entonces es una práctica común dentro del sistema financiero actual donde lo que vale es la ganancia financiera, lo que ha generado una corrupción de tamaño impresionante”.
Las investigaciones tardarán
De ahí que Noemí Levy señale las declaraciones del jefe del Servicio Tributario, Aristóteles Núnez, en relación con que “se podrán tardar dos años las investigaciones, a clientes de HSBC que manejaban cuentas presuntamente para evadir impuestos, donde aparecen más de dos mil mexicanos. El SAT deberá revisar caso por caso las cuentas del llamado caso Swiss Leak para verificar si todavía existen o si de 2006 a la fecha ya se pusieron al corriente. No debería ser el SAT el que lo investigue, debería ser la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, es decir, hay cosas que no se pueden permitir porque finalmente la operación de los bancos está bajo el registro de la comisión, ahí tiene que ver el SAT en términos de pago de impuesto, ésta es una práctica, en los años setenta fue la banca la que propició la salida de capitales vía la banca, se sacó gran parte, es una práctica más o menos, el problema es que hay que regularla, uno de los problemas de la regulación es que generalmente se hace después de que sucede el hecho, aunque no veo yo que haya gran interés por indagar qué paso en este caso”.
Hay que legislar para que se eviten todos estos casos de fraude, de corrupción, de lavado de dinero en el sistema financiero mexicano, es decir, “que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores realmente dé un seguimiento a las operaciones bancarias, generalmente la presión política de estas instituciones, como es tan grande, entre los cinco bancos más grandes en México, que son todos extranjeros, controlan el 80% de los activos de la banca, la presión es de mucho peso y tampoco hay mucha voluntad de parte del gobierno en generar, no puedo decir de manera específica cuáles serían las regulaciones que habría que meter, pero es obvio que habría que sancionar fuertemente, habría que buscar normas muy fuertes y lo más importante es que haya transparencia en la transacción, porque si todo está escondido y es posible cubrirlo, no se descubren las cosas y por tanto no se pueden cuestionar.
Entonces, “uno es la regulación, ahí hay que preguntarle a los técnicos, específicamente cuál es la propuesta de regulación y garantizar la transparencia de las operaciones bancarias y no todo meterlo a que no se sepa. México tiene un sistema en donde el capital financiero domina todas las relaciones económicas, al capital financiero se le permite una cantidad de acciones que bajo otras condiciones no se permitirían, ahora a los bancos les conviene hacer todo esto porque ganan comisiones, la base de los bancos que ha sido la emisión de crédito ha bajado mucho, por eso lo que necesitamos es regulación precisa para el pago de impuestos. México es uno de los países que menos impuestos recauda de América Latina, lo que es una cosa grande de decir, no hay voluntad de pago de impuesto por la sencilla razón que prefieren darle más libertad al capital para que venga, haga lo que quiera pero que venga”.
La banca mexicana no cumple con su función: Gabriel Gómez Ochoa
Por su parte, Gabriel Gómez Ochoa, investigador de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Economía de la UNAM, el sistema financiero mexicano en general “ha dejado de cumplir desde hace mucho tiempo con funciones para las que una economía como la nuestra le demanda; el nivel de crédito, el nivel de captación es de los más bajos de América Latina, no sólo de países comparables con México por tamaño, por desarrollo, sino que está a la altura de los centroamericanos o, peor todavía, hace falta mucho, mucho por apoyar, por aportar, lo que le toca para el desarrollo económico, así como otros sectores; digamos que el sector bancario en particular no cumple con lo que de él se demanda”.
En cuanto al caso del banco HSBC, ése es otro asunto, “el problema aquí fue que se encontraron depósitos de algunos mexicanos o de mucha gente de todo el mundo en el banco HSBC en Suiza y, presumiblemente —todavía no podemos afirmarlo—, fue para evadir impuestos. Los mexicanos, si tienen posibilidades, pueden sacar su dinero e invertirlo donde quieran, el chiste es que si se obtienen rendimientos, intereses, ganancias sobre esta inversión se tendrá que reportar en la declaración de ingresos a la Secretaria de Hacienda, pero igual en otros países se están pagando estos impuestos, en los países en donde están las inversiones. No es posible, es discutible, una doble tributación, todavía está eso un poquito en veremos, se tiene que comprobar que había esos depósitos de mexicanos y que además no pagaron impuestos a la renta sobre los beneficios que hayan obtenido de esas inversiones”.
En ese sentido, “las leyes mexicanas están en consonancia con las del mundo; si HSBC hizo algunas cosas para no reportar las ganancias que tuvieron los mexicanos, estará por verse y a ver qué castigos y sanciones le imponen allá en Suiza a los mexicanos; lo que puede hacer es checarlos, revisar bien cuáles fueron sus beneficios y cobrarles los impuestos y las sanciones que se deriven de ahí por no haber pagado impuestos, que no está relacionado con el sistema financiero sino con el sistema tributario”.