Al menos cuatro muertos y 22 desaparecidos han dejado las intensas lluvias, que afectan a la zona centro-norte de Chile reportadas desde este martes y que se intensificaron en las últimas horas.
En su primer informe oficial de este jueves, el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, dijo que la Región de Atacama sufrió el “mayor desastre pluviométrico de los últimos 80 años”, zona donde no son frecuentes las lluvias porque allí comienza el desierto.
Las comunas más críticas son Alto del Carmen, Tierra Amarilla y Diego de Almagro, ubicadas en la Región de Atacama, distante 805 kilómetros al norte de Santiago, que fueron afectadas por inundaciones y aluviones.
Aleuy detalló que los decesos, debido al mal tiempo, fueron identificados como Christian Cortés, que murió por una descarga eléctrica, y Mauricio Figueroa, por el derrumbe de un estanque de una saladora en la ciudad de Antofagasta.
También entre las víctimas hay una mujer no identificada de 45 años, hallada en las inmediaciones del Río Salado, en Chañaral, y un hombre sin identificar que murió por asfixia.
El subsecretario del Interior, que calificó el temporal como “uno de los desastres más grandes del norte de Chile”, indicó que en la Región de Atacama los albergados suman 800, mientras que en la Región de Antofagasta llegan a 684 personas.
Dijo, además, que los aeropuertos de Antofagasta (mil 370 kilómetros al norte de Santiago) y Copiapó (805 kilómetros al norte de esta capital) se encuentran cerrados para vuelos comerciales.
La situación crítica afecta de igual forma en la ciudad de Chañaral, cuyas calles principales se encuentran intransitables por la acumulación de al menos un metro de barro, piedras y escombros que bajaron por el cauce de un río que estaba seco desde hace años.
El aluvión provocó el corte de electricidad y del suministro de agua potable en Chañaral, ubicada unos 970 kilómetros al norte de Santiago, fenómeno que arrastró a su paso con casas y locales comerciales de madera.
Decenas de habitantes de esa localidad debieron subir a los techos de sus casas y locales comerciales para salvar sus vidas y esperar ser rescatados por bomberos, policías o militares, aunque varias de ellas fueron evacuadas mediante helicópteros.
La pequeña localidad minera de El Salado, cercana a Chañaral, prácticamente desapareció con el aluvión y sus restos bajaron por el cauce del río del mismo nombre.
La presidenta chilena Michelle Bachelet, quien decretó “estado de excepción constitucional de catástrofe” en Atacama, se encuentra en la zona de la tragedia coordinando las medidas para enfrentar el desastre.