Gracias a la inquietud de cuatro estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN), que desarrollaron una silla eléctrica que sirva a personas con discapacidad para poder subir y bajar escaleras, con un novedoso sistema de orugas que les permitirá la adaptación a cualquier tipo de terreno.
La empresa mexicana Planet Chair ya trabaja sobre el perfeccionamiento de este proyecto, informó Julio Flores García, cofundador y director financiero de esta empresa a la agencia Informativa de Conacyt.
Puntualizó que “PlanetChair empezó como un proyecto de tesis de uno de nuestros ingenieros, uno de ellos, Luis Joel Soto Miranda, creó el producto para su titulación en la Unidad Profesional Interdisciplinaria en Ingeniería y Tecnologías Avanzadas (UPIITA), lo quisimos retomar para que no quedara solo en el papel”.
El objetivo de la empresa es presentar el primer prototipo real de la silla, el cual podría esta listo aproximadamente en tres o cuatro meses. “El prototipo que actualmente estamos manejando es a escala, nos ayuda a verificar detalles geométricos y electrónicos”, comentó el egresado del IPN.
Explicó que la silla cuenta con transmisión eléctrica y reductores planetarios que dan la potencia necesaria para poder bajar y subir escaleras. Además cuenta con tecnología mecatrónica de clase mundial y se controla con una palanca tipo joystick.
Por su parte, Flores García, director financiero de la empresa lamentó que este punto sea el más complicado para llevar a cabo un proyecto tecnológico ya que tienen que acudir a diferentes incubadores y compañías para obtener el apoyo. “El factor dinero influye de tal manera que puede aplazar cierto tiempo el proyecto o lo puedes hacer muy rápido. Nosotros tratamos de solucionarlo participando en un fondeo colectivo con Transformadora Ciel; también gracias a Rotary Internacional, y que algunos de sus miembros ayudaron significativamente para sacar adelante la silla eléctrica para discapacitados mas avanzada del mundo” enfatizó.
Señaló que para poder avanzar en innovación se debe invertir un periodo largo sin redituar, para que la empresa obtenga el financiamiento necesario y formar el capital humano que se requiere para alcanzar los objetivos. “Lo primero es tener una idea que brinde solución a algún problema cotidiano o algo que reemplace la tecnología actual pero que implique menos costos de producción. Después, nosotros requerimos un estudio de viabilidad para saber si es realmente factible o no”, puntualizó.
Información de Milenio.


