El gobierno ultraconservador del primer ministro Benjamín Netanyahu canceló este martes —debido a las múltiples críticas— un programa piloto de segregación en los autobuses de Cisjordania, que afectaría a más de 90 mil trabajadores palestinos que se desplazan a Israel y que también utilizan los colonos judíos en territorio ocupado, según dio a conocer la organización humanitaria Paz Ahora y confirmaron fuentes del Ministerio de Defensa.

Issac Herzog líder de la oposición israelí, manifestó su rechazo a la resolución del Ejecutivo en su página de Facebook: “La separación de israelíes y palestinos en el transporte público, echa mas leña al fuego de las críticas hacía Israel en el resto del mundo”. “Es una medida miserable que nada tiene que ver con la seguridad del Estado, Israel necesita un liderazgo responsable”, aseveró.

Los inmigrantes israelíes, que han ganado peso político en el flamante Gabinete de coalición con el partido que les representa, Hogar judío, demandaban desde hace tiempo esta separación de viajeros por razones de seguridad.

El ministro de Defensa Moshe Yaalon, es el principal responsable de la aprobación de la segregación —que según la organización humanitaria—, no tiene precedentes desde que empezó la ocupación israelí en Cisjordania, en 1967. Aseveran que difícilmente se pueden registrar atentados en autobuses en los que también hay palestinos.

Los trabajadores palestinos para regresar a sus casas tenían que utilizar los mismos puestos de control por los que entraron a Israel, sin poder acceder a los autobuses como normalmente lo hacían, que se enlazaban directamente con los asentamientos judíos. Con esta medida se aumenta considerablemente el tiempo de viaje después de la jornada laboral.

“No se trata de apartheid, dijo a France Presse el diputado de Hogar Judío Mordejai Yogev, para justificar la medida antes de que fuera retirada por el Gobierno, la situación ya era insostenible con los camiones llenos de palestinos, que en varias ocasiones han agredido sexualmente a mujeres israelíes, sobre todo a las que prestan servicio militar”.

La radio del ejército israelí aseguró que dirigentes de partidos conservadores y miembros de las Fuerzas Armadas se habían sumado al centroizquierda para expresar su desacuerdo a la separación en el transporte público. El ex ministro Gidon Saar mencionó a la emisora que esa medida solo dañaría la imagen de Israel en el mundo.

Información El País, España.