Santiago I. Soriano Condado
Uno de los estados que durante toda la contienda electoral se ha mantenido en una disputa entre solamente dos punteros, es Querétaro, entidad que actualmente gobierna el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y que el Partido Acción Nacional (PAN) desea recuperar desde que en 2009 la perdieron ante José Calzada.
Son cinco las encuestas sobre preferencias electorales que se han publicado; dos de éstas fueron en marzo, realizadas por las casas Mendoza Blanco y Asociados y el periódico El Uiversal, mismas que fueron bastante diferentes entre sí.
En la de Mendoza Blanco, la carrera que concluirá mañana 7 de junio en Querétaro, colocaba a Roberto Loyola, de la coalición PRI, Partido Verde de México (PVEM), Partido del Trabajo (PT) y el Partido Nueva Alianza (PANAL), como puntero con un 51% de preferencias; mientras que Francisco Domínguez del PAN, contaba con solamente 38%.
Sin embargo, en la encuesta de El Universal, sucedía todo lo contrario. Domínguez apuntaba con 48% mientras que Loyola le seguía cercanamente con 45%.
Loyola y Domínguez llegan empatados al día de las elecciones
Al mes siguiente, en abril, la casa Consulta Mitofsky coincidía con Mendoza Blanco y daba por líder de la contienda al candidato de coalición con un 45%, seguido por el blanquiazul con 39%.
Pero todo se cerró para mayo y junio, los meses más intensos de la campaña por hacerse del gobierno estatal, donde el diario Reforma y la casa Parametría dieron sendos empates técnicos entre ambas candidaturas.
En mayo, Reforma colocó a ambos contendientes con 45% de preferencias electorales; para junio Paremetría colocaba con el mismo porcentaje a Roberto Loyola, seguido con 44% de Fracisco Domínguez.
El PAN gobernó en Querétaro desde 1997 hasta 2009, con los mandatos de Ignacio Loyola Vera y Francisco Garrido Patrón; el día de mañana buscará recuperar dicho estado aunque en la recta final ambos aspirantes se llevan apenas un suspiro de diferencia.
La moneda está en aire.