A pesar de enfrentar los desacuerdos en sus filas, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, logró la aceptación del Parlamento para negociar un acuerdo con los acreedores.
La propuesta presentada por el gobierno heleno fue aprobada con 251 votos a favor y sólo 32 diputados votaron en contra, entre ellos dos del gubernamental Syriza, y hubo ocho abstenciones; los acreedores han valorado positivamente las medidas de Atenas para negociar un tercer rescate, que será debatido por el Eurogrupo este fin de semana.
“Para responder a la pregunta de si hemos cometido errores durante los cinco meses de negociaciones, la única respuesta es contestar de manera afirmativa. Sí, hemos cometido errores”, declaró Tsipras.
También dijo que no tiene derecho de esconderle al pueblo de Atenas que las medidas que Grecia debe tomar están lejos de las promesas de campaña de su partido, pero que su última propuesta contiene medidas que ayudarán a la economía y generará suficientes recursos para acabar con la crisis del país.
Frente a los diputados griegos aseguró: “tendremos un financiamiento a tres años”, contra cinco meses propuestos por los acreedores a finales de junio, “un plan de inversiones” y “por primera vez tenemos un debate serio sobre la reestructuración de la deuda”.
Alexis Tsipras podría enfrentar la baja de varios diputados de su mayoría, pero podrá contar con el apoyo de al menos una parte de los grandes partidos de la oposición.
El reciente paquete de medidas presentado a la Comisión Europea (CE), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE) contempla un aumento de impuestos, de las cotizaciones sociales y reducciones de las pensiones:
Reforma a las pensiones: edad de jubilación se fija en 67 años, o 62 años si se tienen 40 años cotizados. Edad legal aumentará gradualmente hasta 2022.
Reducción de gastos militares: 100 millones de euros en 2015 y 200 millones en 2016.
Reforma administrativa: contratación de gestores para evaluar a los funcionarios y planes de modernización de la administración.
Privatizaciones: venta de partes del Estado al gigante de las telecomunicaciones OTE y licitación antes de octubre para la privatización de los puertos del Pireo y de Tesalónica.
Objetivos Presupuestarios; revisión de los acuerdos de excedentes presupuestarios con los acreedores.
Deuda pública: pide una solución para saldar la deuda (320 mil millones de euros).
Aumento de impuestos de sociedades de 26% a 28%, un IVA del 6.5% para medicamentos, libros y teatro; 13% para alimentos básicos y frescos, hoteles, energía y agua; y 23% para el resto, incluidos restaurantes a los que actualmente se aplica 13%. Las islas del mar Egeo continuarían teniendo un descuento de 30% sobre las tarifas del IVA. Además, considera una subida del 26% al 28% del impuesto empresarial, mientras que el impuesto de lujo pasa del 10% al 13%; como medida de apoyo a las pymes y los trabajadores independientes, propone elevar de 10 mil a 25 mil euros el umbral de ingresos exento del IVA.
“La fecha es el domingo, El domingo tenemos que haber terminado, señor primer ministro. No puedo ni imaginar lo que el país parecería el lunes si no hemos finalizado nuestro acuerdo”, expresó el líder interino de Nueva Democracia.
El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, aseguró este sábado que las negociaciones con Grecia para otorgarle un nuevo rescate serán “difíciles” por la falta de confianza, además de que las reformas presentadas por Atenas “no son suficientes”.
“Hay un grave problema de confianza. ¿Podemos confiar en el gobierno griego para que haga lo que ha prometido en las próximas semanas, meses y años?”, se preguntó Dijsselbloem, que también es ministro de Finanzas holandés, al llegar a Bruselas.