Lo dijo, Siempre!… Sin duda Miguel Ángel Mancera ha reconstruido un gabinete que le blinde, le construya y le limpie el camino político para pelear con firmeza la candidatura de las izquierdas en México a la Presidencia de la República.
De inicio le ha dado el poder necesario a Patricia Mercado para coordinar los trabajos del Gabinete legal y ampliado, a pesar de que la expanista se va a topar con una experimentada Amalia Dolores García Medina, exgobernadora de Zacatecas que ha sido designada titular de la Secretaría del Trabajo, y una celosa del poder, Alejandra Barrales Magdaleno, que estará a cargo de la Secretaría de Educación.
Dora Patricia Mercado Castro, tiene que enviar señales muy claras de orden y lealtad a los colaboradores y operadores más cercanos a Mancera, para dar resultados sociales extraordinarios.
Como economista y responsable de la política interna, está obligada a leer muy bien la estrategia para una buena administración y mantener la imagen de incluyente al jefe de Gobierno capitalino.
Como cabeza operadora, la nacida en Ciudad Obregón, Sonora, su obligación es reactivar las relaciones que hizo como candidata a la presidencia de la República por el Partido Alternativa Social Demócrata (PASD) en 2006, principalmente en el norte del país, bastión del fracaso histórico para las izquierdas.
En la contienda electoral del 2 de julio de 2006, Patricia Mercado, obtuvo 1 millón 128 mil 850 votos (2.70% del total), mismos que le valieron para mantener el registro de su partido y establecer un nuevo récord como la mujer, candidata a la Presidencia de México, con mayor votación en la historia del país, hasta ese momento.
Por otro lado, no es sorprendente que Amalia García ocupe la Secretaría del Trabajo (anterior puesto de Patricia Mercado) sí se toma en cuenta que dentro de su carrera, justamente la movilización de masas y sectores sindicales la llevaron a gobernar Zacatecas.
La también exsenadora, ha militado en al menos cuatro partidos de México: Comunista Mexicano, Socialista Unificado de México, Mexicano Socialista y desde su creación, en el de la Revolución Democrática (PRD), donde incluso fue electa como dirigente nacional para el periodo 1999-2002, acusada de consumar un resultado interno amañado.
Amalia García tendrá otro punto a favor para Mancera. Su excelente relación con su exyerno, Silvano Aureoles Conejo, gobernador electo de Michoacán, les permitirá -ya sea por la vía de partidos o de manera independiente- operar libremente en un estado tan complicado para la vida política nacional.
Incluso, la exdirigenta nacional del PRD, tiene la relación perfecta para conciliar con Andrés Manuel López Obrador, ya que le ha declarado su respaldo y simpatía abiertamente –aunque se declara cardenista-, sin dejar a un lado la cordialidad que sostiene con su antecesor en el gobierno de Zacatecas, Ricardo Monreal Ávila, del círculo rojo de AMLO y Jefe delegacional electo en Cuauhtémoc.
Por último, una tercera mujer clave para Miguel Ángel Mancera, es Alejandra Barrales, que aunque no ha sido una funcionaria y legisladora destacada por su trabajo y logros, tiene un peso significativo de simpatía hacia el electorado.
Barrales, pasó en poco tiempo de ser aeromoza a secretaria de prensa de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) y para 1995 se convirtió en la titular de la Secretaría General de ASSA.
En el año 2002, formó parte del gabinete de Lázaro Cárdenas Batel, recién electo gobernador de Michoacán. La abogada de profesión fue la primera secretaria de Desarrollo Social de ese mandato de izquierda.
María Alejandra Barrales duró muy poco en Michoacán -menos de un año-, tras protagonizar varios escándalos personales, así como al ser acusada de pésimos resultados al frente de la Secretaría.
No obstante, ha sido una mujer con cargos constantes de elección popular, lo que le ha facilitado aún más explotar su pasión: las relaciones públicas. Aunque ahora trabajará en el sistema educativo, con un sector importante como el de los jóvenes, hasta donde se sabe, tiene muy buena aceptación.
Barrales Magdaleno ha sido dos veces diputada local en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, diputada federal por la LVIII Legislatura, y más recientemente, senadora de la República.
Así que de esta forma, Mancera asesta su primer anuncio de cara a prácticas de “Buen Gobierno” e imagen, que ha dejado como piedra angular, recargado principalmente en tres mujeres relevantes de la política nacional mexicana, sin dejar a un lado los demás relevos de su gabinete anunciados este miércoles pasado.