Elige el FMI nuevo director-gerente
Martha Bañuelos
París.- La historia retendrá que en veinticuatro horas, en Francia, una mujer ha tomado todo el espacio que ocupaba Dominique Strauss-Khan hace algunas semanas, ya que este martes 28 de junio Christine Lagarde ocupó la Dirección General del FMI.
Después del escándalo de Strauss-Khan no se apostaba sobre las oportunidades de Francia para estar de nuevo a la cabeza de tan poderosa organización, pero la habilidad y diplomacia francesa se impusieron y se espera que no se olvide la lección: cuando Europa habla por unanimidad, tiene todas las oportunidades de hacer prevalecer sus intereses, incluso en las batallas internacionales.
Los países emergentes, como México, vivieron una amarga experiencia, puesto que fueron incapaces de demostrar unidad sobre una candidatura y rápidamente arruinaron lo que creían una coyuntura favorable, ya que a pesar del papel jugado en la estabilización de la crisis financiera y sus responsabilidades internacionales, quisieron cambiar el camino de una historia escrita de antemano: el Banco Mundial para Estados Unidos y el FMI para Europa.
La ministra de Hacienda ganó porque personifica a la unión monetaria europea y la zona euro demostró así su fortaleza, ya que incluso sacudido por la crisis de la deuda, el euro participa en primer plano por la estabilidad del mundo financiero, reafirmándose tanto en París como en Washington.
Perfil
A los 15 años, Christine Lagarde ganó una medalla de bronce en el campeonato de Francia de nado sincronizado. En 1974 se fue becada durante un año al colegio Holton Arms de Estados Unidos. Después estuvo en el Capitolio como ayudante parlamentario del representante republicano William S. Cohen, quien se convirtió en el secretario de la Defensa de William Clinton. Durante 7 años, fue miembro del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales y copresidió la Comisión de Industrias de Defensa Estados Unidos-Polonia.
La señora Lagarde fue miembro de la comisión para la ampliación de la comunidad euro atlántica y en 2005 estuvo en el consejo de vigilancia de la multinacional ING.
Así, el FMI tiene por primera vez no sólo una mujer como director general, sino a una experimentada mujer de negocios y abogada de Baker & McKenzie, que le sirvió para que la revista Forbes la colocara en 2009 en el lugar 17 de la mujer más poderosa del mundo y para el Financial Times la mejor ministra de hacienda de la zona euro.
Después de diez años fuera de Francia, Lagarde regresó para instalarse en diferentes puestos ministeriales del 2005 a 2007 y como ministra de Economía, Hacienda y Empleo del 2007 al 2010. Fue la primera mujer de un país del G-8 en ese puesto. Entonces declaró “Francia es un país que piensa. Ahora basta de pensar, que el trabajo pague, levantemos las mangas”.
La consagración de Lagarde podría agriarla el Tribunal de Justicia de la República, instancia habilitada para juzgar a los ministros o ex ministros por hechos cometidos en el ejercicio de sus funciones. Dos expedientes, el asunto Tapie y GDF-Suez, la amenazan con enfrentar al tribunal, lo que podría decidirse el 8 de julio.