Juan Pablo Aguirre Quezada*

“La respuesta a cualquiera que hable de exceso de población es preguntarle si él mismo es parte de ese exceso de población, o si no lo es, cómo sabe que no lo es”.

Gilbert Keith Chesterton

La especie humana tiene entre uno de sus principales retos el equilibrio de la población con la cantidad de los recursos existentes en la tierra. Los logros en materia agrícola, medicina y de producción de alimentos son muestra de los grandes avances de la ciencia que han permitido que en las últimas décadas el número de habitantes en la tierra crezca de forma inusitada.

Algunas fuentes estiman que hace 200 años la población mundial era de mil millones de personas. Por su parte la Organización de las Naciones Unidas (ONU) calculó que en 2014 existían 7 mil 200 millones de personas, es decir, 1500 millones más que respecto a veinte años atrás. Sin embargo, el organismo proyectó que en 2030 vivirían 8 mil 500 millones de personas en la tierra, y la cifra pueden alcanzar 11 mil 200 millones en 2100.

Un detalle a señalar es que el crecimiento de la esperanza de vida también influye en una mayor población. Actualmente los países más poblados son: China (1,355.6 millones), India (1,236.3), Estados Unidos (318.9), Indonesia (253.6), Brasil (202.6), Pakistán (196.1), Nigeria (177.1), Bangladesh (166.2), Rusia (142.4), Japón (127.1), México (120.2) y Filipinas (107.6). Estos doce países son los que rebasan la cifra de 100 millones, aunque si se considera a la Unión Europea como un solo bloque tiene 511.4 millones de personas.

India puede superar a China en población

Seis de cada diez habitantes del planeta (4,342 millones) viven en Asia, mientras que África aporta cerca del 16%. Por tanto, en el futuro estos dos continentes continuarán con un alto crecimiento poblacional, lo que impactará directamente en naciones como Estados Unidos de América, Etiopía, India, Indonesia, Nigeria, Pakistán, República Democrática del Congo, República Unida de Tanzania y Uganda, que de acuerdo con la ONU absorberán en conjunto más de la mitad del crecimiento poblacional en los próximos 35 años. Mención especial será el caso de India que puede superar a China como el país más poblado del mundo en 2022.

En tanto Nigeria puede ser el país con mayores tasas de crecimiento y pasar de 182 millones de hoy a más de 262 en 2030. En contraste en 40 países la población decrecerá entre 2014 a 2050, en especial en Alemania, China, Federación de Rusia, Japón, Polonia, Rumania, Serbia, Tailandia y Ucrania. En el caso de México el Consejo Nacional de Población (Conapo) prevé que la población total de nuestro país pasará de 119.7 personas en 2014 a 137.5 millones en 2030, y a 150.8 en 2050.

Sobrepoblación y pobreza

En muchas ocasiones la sobrepoblación ocasiona problemas como marginación económica y social, empeoramiento del entorno, pobreza, alta densidad, daños ambientales, escasez de alimentos, conflictos, entre otros. Asimismo, una mayor cantidad de población genera una mayor demanda de energéticos que hacen posibles diferentes actividades como calefacción, movilidad o uso de electrodomésticos. Por tanto, las variaciones en el número de habitantes pueden modificar los equilibrios económicos de un país o región.

En este sentido, será interesante lo que suceda con India, ya que por primera vez en la historia superará a China como el país más poblado. Si bien la mayor parte de la población vive en Asia un factor que evitará un crecimiento poblacional exponencial son los controles de natalidad que existen en algunas naciones, así como las condiciones económicas que pueden limitar el número de nacimientos, por lo que las tasas de crecimiento no serán tan altas en este continente, a diferencia de lo que sucederá en África, donde países como Nigeria o Etiopía han incrementado el número de seres humanos que viven en su demarcación y que en las siguientes décadas experimentaran altos porcentajes de nacimientos, además de afrontar las consecuencias del envejecimiento de la población.

No obstante a las críticas que produce el tema, el aumento de la población puede tener ventajas como un mayor número de fuerza laboral, que aprovechado de forma óptima puede mejorar la productividad de un país, lo que puede fortalecer al proceso económico siempre y cuando el Producto Interno Bruto (PIB) aumente a un mayor porcentaje que la población. Asimismo, la disminución de población que enfrentan algunos países de Europa y Asia afecta el dinamismo social debido a que una mayor cantidad de adultos mayores no pueden continuar en los procesos laborales y escasea la mano de obra y un desequilibrio ante la falta de generación de recursos financieros para el pago de pensiones. En los próximos años la población a escala mundial continuará su crecimiento, y el equilibrio con el medio ambiente y las condiciones económicas marcarán las características sociales en los diferentes países.

*Profesor del ITESM (Tec de Monterrey)