De acuerdo con el secretario general de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, México ha tenido la reacción correcta ante el complejo entorno global al que se ha enfrentado, hecho que genera un mejor desempeño respecto a otros países.
Sin embargo, el titular de la organización destacó que en noviembre próximo las expectativas de la economía global podrían sufrir un ajuste a la baja en niveles inferiores al 3%, aunque también afirmó que el próximo año será uno mejor para todo el mundo y también para México.
En el marco del primer Impulsando a México: el futuro después de las reformas, Gurría señaló que las expectativas de la OCDE para el país son semejantes a las del Gobierno Federal, al igual que las del Banco de México (Banxico); éstas oscilan entre el 1.7 y el 2.8%, porcentajes que son favorables en un entorno de incertidumbre en América Latina donde ha habido desaceleración de mercados emergentes como el chino, de bajo crecimiento como el de EUA o de repunte nulo como en Europa.
Quien fuera titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) durante el sexenio de Ernesto Zedillo, afirmó que algunas naciones envidian a México pues ésta ha logrado que las reformas estructurales se concreten, principalmente por “la habilidad política para lograr los consensos necesarios” que hicieron posible que así fuera.
Asimismo hizo hincapié en que temas como la desigualdad, informalidad y la productividad siguen pendientes, a la vez que refirió que en su segunda etapa, las reformas deben enfocarse en temas de Estado de derecho, justicia, transparencia y corrupción.
Además, el secretario general de la OCDE reconoció que el tema fiscal es fundamental para México, por lo que consideró que la caída de los precios del petróleo representa una oportunidad que plantee un esquema “normal” en ese sentido, aunque insistió en que las reformas han dado resultados y estos ya se están comenzando a ver reflejados al compensar el impacto de los precios del crudo.
Otro aspecto que José Ángel Gurría destacó fue el de la inversión extranjera directa pues, mientras en otros países este rubro sufrió caídas del 60 hasta el 70%, en México creció una tasa anual del 30% durante el primer semestre del año.
“Las reformas”, dijo, “son nuestra moneda de cambio” al abundar que el interés de inversionistas hacia México como destino es gracias al paquete de cambios constitucionales que la actual administración ha impulsado desde su inicio.
Finalmente hizo un llamado a mejorar de manera urgente pues “venimos de muy atrás y los desafíos son enormes”, además de subrayas que México todavía no pertenece a países a los que los mercados les tienen paciencia, sino que se ubica entre las naciones que donde las cosas bien hechas “dan luz verde”, pero de forma rápida se encienden focos de alerta.