Un 14 de octubre de 1900 en Tlacotalpan, Veracruz, nace Ángel Agustín María Carlos Fausto Mariano del Sagrado Corazón Alfonso de Jesús Lara y Aguirre del Pino, mejor conocido como Agustín Lara, el magno compositor mexicano cuyas líricas siguen recorriendo el mundo universal de la música.

Venido a la Ciudad de México a los 6 años, abandonado por su padre, aprendió piano gracias a una tía y comenzó a trabajar en cabarets para ayudar con los gastos de la casa.

En 1917, se convertiría en un soldado renco por una lesión de guerra originada en combate, y a pesar de haber formado parte del Heroico Colegio Militar, “El Flaco de Oro” (sobrenombre concedido gracias a su extrema delgadez) ya mostraba talento artístico desde una edad muy temprana.

La oscuridad de su vida y la de todos los mexicanos ocurrió un día 6 de noviembre de 1968 después de un accidente que el ocasionó un derrame cerebral, motivo por el cual es obligado recordar en estos días algunas canciones inigualables como Farolito, Aventurera, Granada, Madrid, Solamente una vez, María Bonita, Aquel Amor y Noche de Ronda, las tres últimas dedicadas a una de sus esposas, quien fuera la diva de México, María Félix.

Los restos de Agustín Lara fueron enterrados en la rotonda de los hombre ilustres en el Panteón de Dolores.

Sobre su tumba se destaca una estatua de bronce que en los tiempos más calcáreos de la economía nacional, ha padecido varios intentos de secuestro.

Desde su muerte el mundo ha concedido decenas de homenajes al amado compositor veracruzano a quien México nunca ha de olvidar.

 

Con información de Biografías y Vidas.
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