Jorge Kalil, director del Instituto Butantan, de Brasil

Al principio no se tomó tan en serio el virus del Zika, hasta que comenzó a provocar casos de microencefalia en bebés y cuando la epidemia afectó todos los continentes, explica Jorge Kalil, director del Instituto Butantan, principal responsable en Brasil de la creación de una vacuna contra el virus; la cual asegura podría demorar menos de lo habitual gracias al trabajo adelantado en la vacuna contra el dengue, también transmitido por el mosquito Aedes aegypty.

De acuerdo con el médico, el Zika es una enfermedad parecida al dengue y se llevan años trabajando en la vacuna contra éste. “Estamos en la fase clínica, probando los cuatro serotipos atenuados. Creemos que va a ser una solución importante y que, además, nos puede ayudar mucho a adelantar el trabajo contra el Zika. Normalmente, una vacuna tarda unos 10 años en salir al mercado, pero con la experiencia acumulada con el dengue, creemos que la vacuna contra el Zika podría tardar entre tres años, siendo muy optimistas, y cinco si somos realistas”, aseguró Kalil.

Adicionalmente, dice el médico, se investiga en el Instituto Butantan un suero antiviral a partir de suero animal. Inyectando los anticuerpos antivirales en una mujer embarazada con Zika, no se espera a que la mujer cree sus anticuerpos y se acaba con el virus antes de que cause daños en el sistema inmunológico con inyecciones de un tipo parecido a las que funcionan contra la rabia. Esta solución será más rápida y podría estar lista en un año aproximadamente.

Cuando este suero esté listo, el problema seguirá siendo el diagnóstico, porque la mayoría de las veces la enfermedad es silenciosa y casi sin sintomatología. Por eso, se tendrán que hacer más esfuerzos para detectar el virus en embarazadas y desarrollar exámenes prenatales de calidad para todas las mujeres.