Lo que se avecina

 

El mal es vulgar y siempre humano,

y duerme en nuestra cama

y come en nuestra mesa.

Wistan Hugh Auden

 

 

Hoy domingo 27 concluye la Semana Santa y millones de personas regresarán mañana a trabajar, a clases será hasta la próxima semana; siete días que sirvieron para descansar, reflexionar en el caso de muchos, pero en el de otros que no tienen acceso ni a lo mas básico para poder vivir fueron días como cualquiera de los que han vivido. Sin esperanza, con mucha angustia, dejando pasar las horas como una lenta agonía.

Los legisladores se recetaron unas súper vacaciones, ellos sí se tomarán las dos semanas completas de asueto, parece que no les preocupa que les quedan muy pocos días para cerrar el periodo de sesiones y el Sistema Nacional Anticorrupción no los pone en alerta para que hubieran regresado a trabajar esta semana. El tiempo se esfuma y los desacuerdos en esta materia crecen, se ve imposible que un sistema vigoroso pueda resultar en estos pocos días que les faltan.

La inseguridad, la economía, los problemas nacionales crecen y crecen. Estamos también a unos cuantos días de que arranquen las elecciones en las doce entidades donde habrá cambio de gobiernos estatales, alcaldes y diputados locales, esto pondrá a la clase política a pelear cada centímetro de territorio para alzarse con los triunfos. Por la tanto se vaticina que entraremos en una etapa de guerras mediáticas, acusaciones y un sinfín de lodo que se lanzarán unos a otros, logrando que los ciudadanos se harten y se alejen más de estos procesos.

Pero eso a nadie parece importarle. Sólo están a la espera de los resultados de sondeos, encuestas y ejercicios de medición para ver quién va arriba y quién puede ganar. Si a ello le sumamos que ya tenemos nombres que se han apuntado en la lista de la sucesión presidencial para 2018, entonces el caos, el río revuelto es integral y afecta a todos por igual.

Qué le está pasando a México que no sale de un problema y ya está inmerso en otro, pero tal parce que nos hemos acostumbrado a lo peor, no exigimos lo que nos corresponde, damos por perdido todo. Total nada va a cambiar, dicen muchos.

Desde el arranque de las elecciones próximas estaremos inmersos en esta dinámica, sucediéndose de manera infinita problemas, desánimo y desilusión.

Dos años de elecciones internas en los partidos y constitucionales. La dinámica para el PRI ahora es salir en la foto según el presidente Peña, antes era lo contrario. Para el PAN consiste en pensar sólo en unos cuantos beneficiados y desdeñar a la mayoría, la crisis y las luchas internas serán muy duras. En el PRD y las izquierdas no terminan ni terminarán de ponerse de acuerdo. La chiquillada seguirá viviendo del presupuesto y veremos grandes cantidades de independientes. Pobre México, en este recuento de daños se encuentra narrado el vía crucis que vivimos y padecemos los mexicanos.

 

@perezcuevasmx

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