La armada taiwanesa iniciará la modernización de su flota con doce proyectos navales para los próximos 24 años. Se trata de una política adoptada por el gobierno de Taipei para fortalecer la marina de guerra a fin de contar con una mayor capacidad de combate naval y de coadyuvar al desarrollo de astilleros militares.

A partir del año próximo, se comenzará a fabricar un nuevo modelo de transporte de barcazas de asalto, que además permitirá la rápida colocación de minas, así como nuevas destructores dotados con lanzamisiles. De acuerdo con el vicealmirante taiwanés Mei Chia-shu, el contrato para esta nave de desembarco y los buques anfibios, se completará este año. Luego vendrán los contratos para los barreminas y las corbetas rápidas de clase Chiang Tuo, un prototipo ha estado en funcionamiento desde 2015. Los otros nueve programas previstos para 2040 incluyen un buque de tropas, un transporte de lanchas de desembarco con una cubierta de vuelo para helicópteros, una nueva generación de fragatas de misiles, así como equipos para infantes de marina. El anuncio se produce apenas unas semanas antes del inicio del Salón de la Defensa Marina que se celebrará en el puerto de Kaohsiung del 14 al 17 de septiembre.