Por los caminos del Sur

Acapulco, Gro.- Los hechos de Nochixtlan, Oaxaca catapultaron la protesta magisterial en Guerrero. No solo se ha incrementado el número de participantes sino también se expanden por la geografía del estado, a la vez que consolidan una estructura organizacional y suman causas para las expresiones de inconformidad.

En las movilizaciones efectuadas en rechazo a lo acontecido en Oaxaca, participaron además Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG) y educación media superior, Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG) y normalistas de Ayotzinapa, padres de familia de los 43 normalistas desparecidos.

Paralelamente se han restaurado las Asambleas Nacionales Municipales que aglutinan otras organizaciones que durante el 2014 conformaron el Movimiento Popular Guerrerense, estructura que sustituyó a Asamblea Popular de Pueblos de Guerrero. El apoyo a la causa del magisterio ha sido un punto clave.

Para las dirigencias de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación Guerrero, la instalación de la mesa de diálogo es un primer paso para distender el conflicto pero insistirán en que la Reforma Educativa sea parte de los temas y se deje sin efecto la notificación despido a poco más de 120 maestro en la entidad, coincidieron en señalar Ramos Reyes, Antonia Morales y Walter Añorve. Además señalaron que la unidad es en torno a un punto básico: la destitución de Aurelio Nuño.

José Luis González de la Vega Otero, secretario de Educación, dijo a su vez que la dependencia está obligada a proceder de manera jurídica ante la Fiscalía General del Estado (FGE), cuando hay actos vandálicos en sus instalaciones; precisó que hay “17 o 18 denuncias con nombre y apellido”, y que las pérdidas de la dependencia ascienden a 4 millones de pesos, pero “el mayor daño se lo están haciendo (los docentes) a la sociedad y a ellos mismos”.

Existen 18 denuncias jurídicas, en contra de integrantes de la CETEG, incluyendo a los dirigentes, por los destrozos que hicieron en oficinas alternas de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), cuyas pérdidas ascienden a 4 millones de pesos, apuntó.

Por otra parte, acusó a la dirigencia de la CETEG de mal informar a la sociedad, al asegurar que está garantizada la entrega de certificados en las escuelas de educación básica, en tiempo y forma. De la Vega Otero dijo que de las 12 mil 40 escuelas de educación básica del estado, 70 suspenden clases de manera constante por las manifestaciones contra la reforma educativa y la evaluación; aseguró que le preocupa que los alumnos no reciban sus 200 días de clases, que establece el calendario escolar, pero considera que los maestros están comprometidos con su labor.

En cuanto a los maestros cesados dijo que 189 de mil 280 que no hicieron el examen, y ya fueron convocados a justificar su inasistencia a la evaluación docente, asistieron a comparecer ante las autoridades, y pidió a la federación que le dé validez a sus declaraciones para que no sean cesados.

En conferencia de prensa, gobernador de la entidad Héctor Astudillo hizo un nuevo llamado a los miembros de la CETEG, a mantener cordura, prudencia y no afectar a terceros en sus movilizaciones. Dijo que el gobierno no es enemigo de la disidencia magisterial y que el anuncio del diálogo con la CNTE resulta muy oportuno.

Trabajadores del sector Salud se manifiestan

Por si no bastara, trabajadores del sector Salud salieron a manifestarse en contra de la reforma a dicho sistema en Chilpancingo, Zihuatanejo, Iguala,Taxco, y Acapulco.

Los galenos condenaron que se pretendan privatizar los servicios de salud dejando en manos de empresarios la atención médica que es gratuita en las diversas instituciones del régimen de Seguridad Social.

Los manifestantes declararon su apoyo al magisterio que lucha en contra de la reforma educativa y en rechazo a la violencia por parte de la Policía Federal contra los maestros de Oaxaca, porque consideraron que es el preámbulo de lo que puede ocurrirle al sector Salud. La mayoría de los doctores y enfermeras vistieron una playera blanca con la leyenda “No a la reforma de salud”.