Theresa Solís/Productora audiovisual/México

onka rostro1Un Brasil que grita en voz de sus habitantes, artistas y atletas: “Fora Temer”, presidente interino abucheado durante la inauguración de los Juegos Olímpicos, debido a encabezar una presidencia que emergió de la turbulenta situación política que removió a Dilma Roussef, presidenta electa por 54 millones de votos y apartada de su cargo mientras es juzgada por 81 senadores, motivo por el que seguramente en los Juegos Olímpicos se concentraron el menor número de mandatarios de la historia reciente, entre ellos el francés François Hollande, el argentino Mauricio Macri, y el primer ministro italiano Matteo Renzi. Destacó a nivel humano que la Delegación Olímpica de Refugiados fue la más aplaudida en la entrada al estadio Maracaná, y hoy con Yusra Mardini, la nadadora siria de 18 años se ha ganado la primera de las eliminatorias de 100 metros estilo mariposa.

Arlette Carreño/Periodista/SPR/ México

1375908_1178500415512472_7642640860778497096_nPor primera vez en la historia de nuestro país, los únicos que no juegan en la transmisiones de los Juegos Olímpicos de Río 2016, son las dos cadenas de Televisión que tradicionalmente tenían protagonismo en México: Televisa y TV Azteca. El gran negocio de las emisiones de la olimpiada sucumbió ante el magnate Carlos Slim, quien compró los derechos de emisión para emitir a través de las plataformas de internet en UnoTV y Claro Sports. La era del internet muestra su fuerza durante estas transmisiones a través de plataformas digitales y para los mexicanos que aún gozan de sentarse frente a un televisor, pero que no tienen televisión de paga para ver por ESPN y Fox Sport, una de las justas deportivas más preferidas. De esta manera podremos disfrutar, la participación 126 deportistas mexicanos, 81 hombres y 45 mujeres, el mayor contingente registrado históricamente.

Tania Valeria/Community manager/Conalep/Edomex

13606736_10154981955578219_2627284341417281483_nJugar es un balance de poder, de obtener los resultados. La manera de enfrentar nuevos retos para crecer y transformarnos en quienes creemos y creamos ser. Ver a los atletas es una inspiración, vislumbrar lo que los seres humanos podemos lograr. Cada cuatro años podemos disfrutar de observar el resultado de tiempo y energía que se envuelven de esfuerzo, dedicación y disciplina de aquellos que se atreven, convirtiéndose en los mejores del mundo. Tomamos la pertenencia a nuestra nación y abrazamos el fuego olímpico con gran entusiasmo. Bienvenidas sean las medallas mexicanas porque son la materialización de sueños concretados de quienes se atreven a brillar.

Pancho Cárdenas/Escultor/México/Iztapalapa

PanchoLuces y más luces enmarcaron esta gran inauguración de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. Visto desde las paupérrimas favelas, toda una cortina de hipocresía y contraste social, un juego de conciencias con un pretexto ecológico. La deforestación de sus selvas por el hambre de petróleo, devastando a su pueblo y fauna. El haber retomado sus orígenes desde las conquistas españolas; todo lo que ha sufrido su gente y el mismo territorio dejó un mal sabor de boca. El multicolorido de los bailarines y del gran espectáculo de la samba; los grandes atletas. El gran escultor del emblema en movimiento de la antorcha, los refugiados políticos, la corrupción y los países en guerra. Todos nos hacen recordar nuestros tiempos violentos. Es puro disfraz.

Alejandro Barragán/Fotorreportero/Agro2000/Blasting News

13900986_659084474239299_1453302486_nHoy los juegos olímpicos de la era moderna celebran 120 años de su instauración a finales del siglo XIX en un contexto mundial que necesita más que nunca, o como nunca ha dejado de necesitar, el llamado de hermandad entre naciones y juego limpio enarbolado por la justa olímpica. Cada cuatro años los juegos olímpicos rinden homenaje a los más veloces y los más fuertes, a quienes llegan más alto y demuestran lo que es capaz de lograr el ser humano con disciplina, entrenamiento y la siempre necesaria presencia de un rival digno. La olimpiada presenta, una vez más, a la humanidad una alternativa al odio, los conflictos y la guerra, una nueva ocasión para aprender de los mejores una lección de camaradería, una oportunidad más para que el deporte nos muestre la importante diferencia entre respetar a un rival y odiar a un competidor enemigo.

Foto: Gerardo Yong
Obra presentada en la exposición “El arte olímpico en Latinoamérica; México 1968, Brasil 2016”, auspiciada por la Embajada de Brasil en México y exhibida en el Centro Cultural Brasil México.