En México cada vez son más los jóvenes de entre 14 y 18 años que se integran al crimen organizado, estos pequeños capos de la droga se han dedicado a ser sicarios, halcones o mulas, esto de acuerdo con el Informe Especial “Adolescentes: Vulnerabilidad y Violencia”, que presentó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
En este estudio fueron entrevistados alrededor de 730 menores provenientes de 17 estados del país que cometieron algún tipo de delito tal como homicidio, violación, secuestro y robo, y que tienen vínculos con el crimen organizado.
Así, se determinó que había menores de 16 y 17 años que además de cometer crímenes, tenían gente a su cargo o estaban al mando. A través de sus testimonios, Elena Azaola, Investigadora del Centro de investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (Ciesas), quien dirigió las indagatorias, dijo que los jóvenes dieron descripciones detalladas de cómo realizaban sus actividades.
El informe se centra en los 3 mil 761 (28 por ciento) adolescentes recluidos acusados por cometer delitos graves, como homicidio, robo y secuestro, y por delitos contra la salud.
Azaola dijo que todo este problema se ha generado porque los menores tienen carencias económicas y afectivas y, por lo tanto, buscan un ingreso fácil, además aseguró que hay jóvenes que ingresaron a las filas del crimen desde los 12 años.
En este estudio se reveló que el 57 por ciento de los jóvenes que fueron aprehendidos y trasladados, sufrieron tortura por parte de policías municipales, estatales, marinos, militares y federales.
Asimismo el 70 por ciento de los menores que cometieron un delito, confesaron haber utilizado armas de fuego que les otorgaron integrantes del crimen organizado, para cometer diversos delitos.
El 38 por ciento de los entrevistados, cometió un delito por tener conflictos personales en sus contexto familiar, mientras que el 27 por ciento dijo pertenecer a una pandilla.
La muestra arrojó que el 34 por ciento de los menores está recluido por homicidio; por robo 24%, por secuestro 13 por ciento; 12% por violación. Por el delito de robo de vehículos, 4 por ciento, y el 3% por delitos contra la salud.
Continuamos: Informe Especial “Adolescentes: Vulnerabilidad y #Violencia” https://t.co/8Fro9XTTUC
— CNDH en México (@CNDH) 18 de enero de 2017


