Jacquelin Ramos
Una Constitución es la sumatoria de la historia, la política, la cultura y la economía de un país y es lo que encontramos en nuestra Carta Magna, promulgada hace cien años: soberanía, identidad, respeto a los derechos; en suma, amor a México. Hoy a pesar de que nuestra Constitución difiere en muchos aspectos de la forma en que fue concebida aquel 5 de febrero de 1917, debido a las reformas que se le han hecho, representa un baluarte de la democracia de nuestro país y una herencia viva de la lucha revolucionaria de nuestros antepasados.
“Este documento continúa vigente, aunque a lo largo de la historia ha sido reformada en cerca de 700 ocasiones. Es nada menos que la norma fundamental de coexistencia pacífica en una sociedad organizada y constituida por un estado. Gracias a las normas que ahí se establecen, se garantizan los derechos de todas las personas. Por ello es importante que se conozca, se cumpla y se verifique nuestra Constitución”, señaló en entrevista a Siempre! la historiadora Patricia Galeana.

Patricia Galeana
Añadió que el texto promulgado por el presidente constitucionalista Venustiano Carranza fue el primero en la historia en incluir los derechos sociales, marcando de esta forma un antecedente para el resto del mundo, lo que le otorgó el reconocimiento de la primer Constitución social del siglo XX.
Una de las aportaciones más importante de la constitución de 1917, expresó la doctora Galeana, fue “establecer los derechos sociales; proteger los derechos del hombre —como antes se les nombraban—, hoy, los derechos humanos”. Sin embargo el espíritu de la Constitución de 1917 es tener conciencia de que, además de los derechos sociales, están por encima los derechos de una sociedad, es decir, tanto el pueblo de una nación y el Estado tienen la obligación de garantizar estos derechos, de ello derivó lo que ahora conocemos como trabajo y previsión social.
Lo anterior hace la diferencia sustantiva con la Constitución de 1857, aprobada bajo la presidencia de Ignacio Comonfort, donde hubo constituyentes que también plantearon que debería de haber derechos, pero ahí fundamentalmente se referían a las personas campesinas, no de los obreros; no había una clase obrera como en 1917.
Estos temas, señaló la también directora del Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revoluciones de México (INEHRM), siguen marcando un punto álgido en nuestra constitución: “recalcan no sólo lo establecido, también el compromiso de lucha por las reformas sociales y derechos a favor de los obreros y los campesinos”.
La constitución, parte de nuestra historia
México ha tenido una transformación significativa durante estos cien años, y con esa transformación, nuestra Carta Magna también ha tenido reformas y cambios; en este sentido, destacó Galeana, se intensifica cada vez más un desconocimiento de nuestra constitución por parte de la gran mayoría de los mexicanos, “no se ha logrado un conocimiento pleno de los derechos, de las obligaciones, de las responsabilidades que implica el texto constitucional, aún más, no se ha logrado un reconocimiento histórico de nuestra Constitución”.
La doctora asegura que “es necesario recordar nuestras efemérides históricas, y la Constitución es una de ellas, debemos recordarla, revalorarla, pero sobre todo conocerla, porque nos da luces para comprender nuestro presente y planear un futuro mejor”.
Recordó Galeana que tras su designación como secretaria técnica del Comité para la Celebración de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, su encomienda debía basarse en tres importantes ejes.
“El primero es recordar la historia que nos constituye como nación. Segundo, difundir el contenido de la Constitución para que la ciudadanía conozca sus derechos y obligaciones. Tercero, reflexionar sobre los mejores mecanismos para que se cumplan las normas que nos hemos dado como una sociedad civilizada que quiere vivir en paz, y que desea un Estado de derecho donde se cumplan las normas”.
Añadió la historiadora que para conmemorar el centenario de nuestra Carta Magna, que además se da en un momento de grandes cambios en el país, se alistaron diversas actividades que servirán para remitirnos a los antecedentes históricos y políticos, al contexto social y a las influencias ideológicas que en su momento nutrieron a los diputados del Congreso Constituyente de Querétaro para llevar a cabo su magna labor, que dio como fruto el texto constitucional que en su momento fue un texto constitucional adelantado.
Entrevista con Mercedes de Vega/Directora del Archivo General de la Nación
Goza de cabal salud
Entre las actividades estelares programadas para la celebración del centenario de la Carta Magna, el Palacio Nacional abre sus puertas a la magna exposición conmemorativa en la que se exhibirán, entre otras joyas documentales, los originales de la Constitución de 1917, del Acta de Independencia de México, los Sentimientos de la Nación, así como las Constituciones de 1814, 1824 y 1857. Para ello, “estos documentos resguardados en el Archivo General de la Nación (AGN) fueron trasladados del Palacio de Lecumberri a Palacio Nacional bajo estrictas medidas de seguridad y conservación”, manifestó a Siempre!, Mercedes de Vega, directora del Archivo General de la Nación.

Mercedes de la Vega
“Nuestra Constitución goza de cabal salud, se encuentra en condiciones realmente excelentes, por eso se determinó que podía salir de su casa para su exhibición”.
Explicó que particularmente la Constitución de 1917 requirió de un proceso de estabilización con el objetivo de que durante su exhibición y su traslado a Palacio Nacional no sufriera ningún tipo de deterioro, y regrese en las mismas condiciones en que salió.
“Entendemos perfectamente que es un documento único e irremplazable”, al que no podemos fijar un valor económico, apunta. Es una Constitución que no se imprimió, como algunos pudieran pensar. Se trata de “un manuscrito elaborado con una caligrafía muy clara, muy hermosa, realizada por un experimentado escribiente de la época. El haberse escrito a mano le da un valor excepcional”.
Por otro lado, destacó que poner en relieve el patrimonio documental de México es uno de los objetivos fundamentales de la exposición en Palacio Nacional. “México tiene un patrimonio documental extraordinario no solo en el Archivo General de la Nación, también en otros repositorios documentales”, aseguró Mercedes de Vega.
“Estamos convencidos de que no podríamos llevar a cabo una conmemoración, una celebración, sin tomar en cuenta los documentos que están en los archivos y que son los que precisamente nos permiten conocer la historia, para reconstruirla e interpretarla. Estos documentos, sencillamente, son en esta celebración un elemento fundamental; queremos que la gente que visite la exposición cobre conciencia del patrimonio documental de México”.
Gracias a esta muestra el público podrá conocer el original de la Carta Magna, que por razones de seguridad y preservación no se facilita ni se presta para consulta; sin embargo, el archivo cuenta con facsímiles de muy buena calidad, los cuales pueden ser consultados por el público. Además, también cuenta con una versión en formato digital del original de la norma fundamental del Estado mexicano, para que cualquier ciudadano tenga acceso a este documento.
La Carta Magna debe integrarse a la Memoria del Mundo
Actualmente la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917 se encuentra en estado de nominación para su inscripción en el programa Memoria del Mundo de la UNESCO.
“Es vital reconocer la gran influencia que tuvo la Constitución de 1917 en la redacción de un gran número de constituciones alrededor del mundo, y en la adopción de diversos instrumentos internacionales de primer orden en la protección de los derechos humanos”, explicó Mercedes de Vega, quien junto con el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, Enrique Graue, signaron —en mayo del 2016— el Formulario de Nominación.
Consideró que sería “un honor para México que se reconociera y enalteciera el valor que aporta la Constitución de 1917 a la historia, la cultura y la sociedad, no solo nacionalmente, sino internacionalmente, en el marco del centenario de la creación de nuestra constitución”.
Por el momento, se espera contar con los resultados de la nominación una vez que el Comité Consultivo Internacional de la UNESCO concluya con el proceso de evaluación, en octubre de 2017.
“Hoy más que nunca —en estos difíciles por los que pasa nuestro país— hay que recordar nuestra historia. México a lo largo de su vida independiente ha enfrentado situaciones tan complejas como la que estamos viviendo hoy en día. En la historia siempre podemos encontrar respuestas clave para solucionar los problemas del presente; sin duda alguna en nuestra Carta Magna encontraremos muchas de ellas”, concluye la entrevista la directora del Archivo General de la Nación, Mercedes de Vega.