A más de 70 años de la fundación de la Organización de las Naciones Unidas, los vientos de guerra y los conflictos armados y sociales aún persisten con gran fuerza. Durante la 72 conferencia anual de este organismo internacional, el secretario general del organismo internacional, Antonio Guteres advirtió sobre el repunte del terrorismo, los conflictos nucleares, la descomposición de la comunidad internacional, en referencia a la crisis de Siria y, ahora, a la de Birmania, pasando por las amenazas de Corea del Norte e Irán.
En ese foro, que fue abierto por el presidente brasileño, Michel Temer, siguió el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien amenazó tajantemente a Norcorea con eliminarla de la faz de la Tierra por sus constantes desafíos a las políticas internacionales. El magnate inmobiliario arremetió también contra Irán; a ambos países los calificó de “estados parias y criminales”.
“Nadie quiere ver a estos criminales con misiles y armas nucleares”, dijo. “Y si Estados Unidos se ve obligado a defenderse a sí mismo o a sus aliados, no tendremos otra alternativa que destruir totalmente a Corea del Norte. El hombre cohete (Kim Jong-un) está en una misión suicida. Estamos listos. Esperamos que esto no sea necesario”, indicó.
Asimismo, Trump reafirmó que la línea de su política exterior se basará “siempre” en el principio de “América primero”. El millonario neoyorquino agradeció la ayuda recibida tras la devastación provocada por dos huracanes, en Texas y Florida. También reportó que el desempleo en la Unión Americana se encuentra en su nivel más bajo en los últimos 16 años.
“El mercado está en una alza récord, el desempleo es el más bajo en 16 años, hay más gente trabajando en EE.UU. que nunca antes. Las empresas están regresando, y recién se anunció 700 mil millones de dólares en presupuesto militar: será el ejército más grande”, afirmó.
Cuba y Venezuela no pudieron escaparse de su mira. Al primero lo tildó de “corrupto” y al régimen de Nicolas Maduro como una dictadura que está llevando al país hacia la ruina.
Sólo para que lo perciban: Con éste comentario que hace Trump, sella prácticamente el fin de la hegemonía de Estados Unidos. La hegemonías siempre tienen costo y se pagan porque uno es el mejor del planeta. Al decir lo siguiente, está reconociendo que ya no le interesa estar al frente de las naciones. “Fui elegido para gobernar para el pueblo americano, como presidente de EE.UU. siempre pondré a América primero. Así como ustedes deben y deberán siempre poner a sus países primero”, enfatizó. ¿Quién tomará ahora el lugar de Estados Unidos?