En recientes notas me he referido a Tayde Acosta Gamas porque recopiló en dos tomos obras de Antonieta Rivas Mercado. Por otro lado, este 15 de mayo se cumplieron siete años de la muerte de Carlos Fuentes. El segundo aniversario de su fallecimiento se conmemoró en el Museo Tamayo y consistió en una lectura de su cuento “Chac Mool” que leyó, a petición de Silvia Lemus, el gran director teatral José Luis Ibáñez. La segunda parte del programa fue la lectura de un texto de  Tayde sobre el famoso y fantástico cuento de Los días enmascarados, libro donde ya el escritor está, como quien dice, de cuerpo entero. La viuda de Fuentes lo leyó, dándole el crédito a la investigadora. Finalmente, el texto de Tayde, boicoteado en otros medios, apareció en La cultura hoy, mañana y siempre, suplemento en línea de Siempre!

 

Krauze contra Fuentes

Ahora que Tatiana ClouthIer acusó a Enrique Krauze de estar implicado en una guerra sucia contra AMLO, auxiliado por su lugarteniente Fernando García Ramírez, no puede uno más que recordar que Krauze fue autor de otra guerra sucia, aquella vez contra Fuentes, cuando se rumoraba que los candidatos para el Premio Nobel de Literatura eran Paz y Fuentes. Krauze fue autor de un artículo sobre Fuentes titulado “El dandy guerrillero”, donde se trataba de restarle admiradores de izquierda por lo de dandy y dejarlo sin partidarios de la derecha por guerrillero. Paz se lavó las manos aduciendo que era responsabilidad de Krauze, lo que me parece poco probable. Fuentes aceptó la disculpa de Paz y respondió que no iba a permitir que los separara esa “cucaracha”. No paró ahí el pleito, las huestes de Vuelta y luego de Letras Libres se han dedicado a denostar a Fuentes y a García Márquez por evidentes razones ideológicas: García Ramírez era asesor de Ricardo Anaya y el libro de Krauze Por una democracia sin adjetivos fue reconocido como su ideario en la campaña de Fox. Usted dirá muy su gusto y muy sus ganas de ser panistas, para eso existe la libertad de expresión. Pero es otro cantar que unos empresarios patrocinen campañas en contra de un candidato y que por medio de una empresa se lancen fake news en redes sociales en forma anónima. A eso se llamó, por el local que tenían en Coyoacán, Operación Berlín.

La dimensión internacional es obvia, García Ramírez en El Financiero fue el que señaló a John Ackerman como el contacto en Moscú del entonces candidato, sólo porque John tiene una columna de las que llaman sindicadas o sea que se publican en varias partes de mundo, entre otros lugares… en Rusia. Expresivo como es, John dijo que le parecía simplemente delirante, que en otro tiempo lo habían llamado “por gringo”, agente de la CIA, pero agente de Moscú y La Habana nunca. Por cierto, sus artículos han aparecido en The New York Times, Chicago Tribune o Los Angeles Times en Estados Unidos o The Guardian en el Reino Unido. Recibió el Premio José Pagés Llergo en 2010. John está casado con la economista (y por cierto alumna de mi hermana) Irma Eréndira Sandoval, hija del guerrerense Pablo Sandoval Ramírez (quien ya falleció) y sobrina de Luis Sandoval Ramírez, luchadores sociales desde hace rato. Todo esto lo reveló Ackerman en entrevista radiofónica. Hace tiempo que se nacionalizó mexicano.