Entrevista a Julio Portales, vicepresidente consejero Constellation

Avanza el proceso para la instalación de la planta cervecera de Constellation Brands en el Valle de Mexicali luego de que el Tribunal de Justicia Electoral del Poder Judicial de Baja California, declarara improcedente el plebiscito que fuera promovido por activistas para evitar su construcción debido al impacto que generaría por la disponibilidad del agua en la región. Hoy los ojos están puestos en los trabajos que realiza la Comisión implementada por el presidente Andrés Manuel López Obrador para analizar la viabilidad de la planta.

Julio Portales, vicepresidente consejero de Constellation –empresa que llegó a México hace 6 años, productora de marcas como Corona o Modelo– es enfático al ratificar que se quedan en México para seguir invirtiendo y generar empleo en Mexicali. Asegura que se han presentado estudios científicos serios que avalan la viabilidad y sostenibilidad ambiental del proyecto a la comisión y convertirse “en el mejor ejemplo de cómo una inversión de una multinacional debe hacerse en tiempos de la 4T”.

En entrevista para este semanario, Portales señala que la empresa que representa solo atiende al mercado estadounidense con un portafolio de cervezas como Victoria, Pacífico, Corona y Modelo Especial, “en esa operación, en 2013, el primer acuerdo hecho con Modelo y con Anheuser Busch InBev fue el interés por comprar una planta para producir la cerveza en México. ¿Por qué? Porque la cerveza tiene un certificado de origen, tiene que ser mexicana  ya que buena parte del prestigio es que está hecha en el país por manos mexicanas y en este territorio”.

Explica que debido a ello se compró inicialmente la planta de Nava en Coahuila –pertenecía a Modelo– cuya modernización concluirá en las próximas semanas y se convertirá en la planta más moderna de producción de cerveza en el mundo. En ella se producirán 30.5 millones de hectolitros –referencia en la industria para hacer más chicas las cifras– pero al crecer la demanda por la cerveza mexicana en Estados Unidos, se compró una segunda planta en Ciudad Obregón, Sonora, que terminará su expansión en octubre próximo para tener una capacidad de 8.5 millones de hectolitros. Sumadas las dos plantas se tendría una capacidad de producción de 39 millones de hectolitros.

Julio Portales, vicepresidente consejero Constellation

La calidad de la cerveza mexicana fomenta el crecimiento de la sed estadounidense, por lo que la empresa se plantea construir una tercera planta en Mexicali, que inicialmente está pensada para tener una capacidad de 5.5 millones de hectolitros. Las tres plantas sumarían 43 millones de hectolitros para todo el Grupo.

Destaca que las dos primeras planas convirtieron a Constellation Brands en el inversionista directo más importante del país al destinar 9 mil millones de dólares durante la pasada administración y en el principal exportador de la cerveza mexicana.

“Del empleo de cero en 2013, hoy ya somos 4 mil 500 colaboradores en México, que forman parte de los 9 mil empleados en todo el mundo, lo que habla de un crecimiento vertiginoso, de un interés inusitado del producto en el mercado estadounidense”, apunta.

 

Se crean las alarmas

En 2016, al anunciarse la construcción de la planta en Mexicali, se iniciaron las protestas de activistas ambientales y algunos agricultores exigieron la paralización de la construcción alegando que no contaba con permisos y podría tener un impacto ambiental por el consumo de agua que se requiere. Señalan que es mejor que se cambie de estado.

Julio Portales asevera que el mayor consumo de cerveza se da en la costa oeste, por lo que estratégicamente la planta tiene que estar en el lado oeste del país. ¿Por qué Mexicali? Porque se hicieron estudios hídricos que apuntan que Mexicali es el mejor sitio “desafortunadamente hubo desinformación en estos dos años generada por un grupo de opositores para crear una histeria colectiva de ‘se va acabar el agua’”.

Destaca que el Valle de Mexicali se irriga con el afluente del rio Colorado que baja de las Rocallosas y desemboca en el delta que entra el Mar de Cortés. El flujo del río, asegura, es de mil 800 millones de m3 al año, que si se agregan a los pozos que hay en las cuencas subterráneas —mil millones—, se tendrían 2 mil 900 millones de m3 y la planta va utilizar 2 millones de m3 contra 3 mil millones de m3, que en porcentaje es el 0.06 por ciento.

Portales reconoce que si hay un problema hídrico porque aunque existe este gran flujo de agua del río, llega a Mexicali y riega a la zona del Valle, reconocida por su riqueza agrícola y donde hay una gran siembra de alfalfa y trigo, cultivos que toman mucho agua.

El Valle, señala, tiene 200 mil hectáreas de extensión de las que solo se van a regar 100 mil y el resto se escurre al río y se va al mar. Además, apunta, de las 100 mil hectáreas que se siembran se calcula que hay un desperdicio de agua del 45 por ciento “las 100 mil hectáreas ocupan 800 millones de m3 de agua, voy a ocupar 2 millones de m3 pero la agricultura ocupa 800 millones de m3. Los agricultores desperdician alrededor de 350 millones de m3. ¿Quién le quita el agua a quien?”, resalta.

 

Huachicoleo de agua

Portales revela que en la práctica de siembra en México, lo que se llama el agua robada provoca el huachicoleo del agua.

Puntualiza que el desperdicio del vital líquido se da porque no hay tecnificación, los canales no están bien pavimentados, porque las compuertas no son hechas adecuadamente y sobre todo porque no se cuenta con tecnología para vigilar que por las noches algunos abran las compuertas, rieguen sus hectáreas y dejen a los demás sin agua.

Aclara que el agua rodada es una práctica que genera el huachicoleo, la venta de agua de manera informal e ilegal que es un tema al que no se le ha entrado como país.

Asegura que buscan aportar soluciones ya que en el Valle del Yaqui en Sonora, trabajaron con el distrito de riego y los agricultores para hacer una inversión con el gobierno, el municipio y el distrito de riego e introducir tecnología e infraestructura que permita cuidar el agua, “usamos 1.2 millones de m3 y le ahorramos al Valle 25 millones de m3. No solo equiparamos lo que gastamos sino contribuimos a que haya un uso más racional y eficiente del agua en la zona”.

El funcionario de Constellation destaca que si les permiten terminar la planta de Mexicali, la intención es trabajar con los agricultores en una coinversión para mejorar y eficientar el uso del agua, “si utilizó 2 millones de m3, pero contribuyo a que haya un ahorro de 50 mil 100 millones de m3 de agua al año”, recalca.

Comisión de análisis presidencial

Portales recuerda que durante la pasada visita del presidente Andrés Manuel López Obrador en marzo a Mexicali, se anunció la creación de una comisión que analice la viabilidad de la obra, la cual ya está trabajando y de la que forman parten la secretaría de Economía y Semarnat, así como Conacyt, Conagua y Sedatu, a los que la empresa les ha presentado información –entre otros del Colegio de la Frontera Norte y del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua– que explica la viabilidad hídrica y el impacto que la planta generaría en la zona. La información, asegura, es sólida y seria.

Plantea que en este semestre la empresa ha dado la batalla legal para evitar un plebiscito público. Aclara sin embargo  que no se trata de que estén en contra de la opinión pública, sino que la intención de los organizadores de ese  procedimiento tenía un objetivo político, ya que buscaban obtener puestos públicos en las pasadas elecciones que no lograron.

“El Tribunal Electoral de Baja California votó a nuestro favor, lo mismo la sala de Guadalajara y este grupo insistió de llevarlo al nivel del TRIFE, que votó que no era procedente. Cuando tres instancias y la más alta dice ‘no procede’, esperaríamos que entiendan, pero no es así, dieron una conferencia de prensa diciendo que llevarán el caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos”, señala.

Aclara que se ha trabajado de la mano del gobierno en los tres niveles, en particular con el gobierno entrante de Morena, para transmitirle el mensaje y sepan que se trata de un beneficio para los mexicalenses, ya que se trata de la inversión más grande en la historia de la entidad “si la terminamos, es una inversión de mil 500 millones de dólares y llevamos un 60 por ciento de avance”.

Asevera que el monto de empleos directos e indirectos es muy importante porque buscan ser una industria ancla que atraiga otras inversiones vinculadas a ese sector, inversiones en el campo para la siembra de cebada, manufacturera para la fabricación de la malta, planta de producción de lata de aluminio, de vidrio, “un efecto multiplicador integrado en la cadena productiva horizontal y vertical”.

 

Qué sigue para Constellation

Al referirse a la amenaza de establecer aranceles por parte del gobierno estadounidense, Portales señala que la industria cervecera sería afectada.

“Lo que no se ha explicado es que en el proceso de una empresa de exportación, los aranceles se cascarean. ¿Cómo? para fabricar una lata de cerveza, importo aluminio o la cebada o el lúpulo.

“Si el gobierno mexicano decidiera aplicar aranceles, esos ingredientes van a estar gravados y provocar un alza de costos. Al momento que tengo el producto terminado y lo envío ya habrá reflejado los impuestos por importación y seguramente reflejara el nuevo impuesto hacia la exportación. ¿Qué sucederá? va a generar un  producto caro, que terminará pagando el consumidor estadounidense”.

El vicepresidente consejero recalca que la empresa se queda en México ya que es su destino, “estamos absolutamente destinados a estar aquí por el tamaño de inversión hecha y por el tamaño de inversiones que seguimos haciendo. Para efectos de la administración del presidente López Obrador, estamos comprometidos de qué vamos a seguir haciendo inversiones muy sustantivas, simplemente seguiremos. Para producir cerveza mexicana tenemos que estar en México.

“Hay que seguir invirtiendo, la expansión del mercado lo exige y por la estrategia de mercadotecnia y distribución que seguimos en Estados Unidos, estamos ciertos que el crecimiento del mercado seguirá rampante. Hoy tenemos muy bien ubicado y posicionado el producto en la costa oeste pero no hemos iniciado un trabajo profundo de conquista de la costa este, ni terminado de entrar adecuadamente en el centro del país”, apunta.

Manifiesta que el apetito por la cerveza mexicana en el mercado estadounidense sigue creciendo, lo que los lleva a decir que deben seguir invirtiendo con productos de una muy alta calidad y asevera, “como empresa responsable hay todo un trabajo de generar un entorno de sustentatibilidad social, no solo ecológica. Estamos preocupados por el tema ambiental porque el recurso acuífero no solo se conserve, sino crezca, es así cómo me vinculo en los tiempos de la 4T, como una empresa no solo socialmente responsable sino socialmente sustentable avocada a ver como multiplica el efecto de generación de riqueza en las zonas en las que opera”.

 

Estado de Derecho

Julio Portales reconoce el manejo inteligente del primer mandatario López Obrador y del candidato a gobernador ganador del pasado proceso electoral Jaime Bonilla, al nombrar una comisión de expertos “para que despejen dudas y quiten prejuicios generados a partir de una desafortunada campaña de comunicación”.

Asegura que a este tema debe quitársele el elemento político ya que se trata de una decisión técnica “construir una planta no está sujeto a si le pregunto a todo mundo cómo la ve. Es importante para el estado de derecho que las inversiones privadas en este país no necesariamente deberían estar sujetas a consulta pública, si cumplen con todos los requisitos de ley. Hoy en día también habría que hacer un ejercicio desde la iniciativa privada de demostrar que el impacto social es el adecuado.”

“Las consultas públicas y los plebiscitos deberían de ser para inversiones con dinero público porque es el dinero de los contribuyentes. Sería una manera lógica de normar la participación ciudadana en este tipo de ejercicios donde es muy importante que el ciudadano opine, sí, sobre las cosas que son con dinero de todos”, advierte.

De verdad, recalca, “queremos ser el mejor ejemplo de como una inversión de una multinacional debe hacerse en México en tiempos de la 4T”.