A unos días de que MALO haga su primera salida de México a Washington, los Estados Unidos han postulado por primera vez en los 61 años de la historia del BID, a un norteamericano para que presida el crucial Banco Interamericano de Desarrollo.
Es muy significativo que el nominado sea Mauricio Claver Carone, muy cercano a Trump y quien fuera director para América Latina del Consejo de Seguridad Nacional.
Más importante resulta esto al saberse que quien compite con él es Gustavo Béliz, asesor estratégico del gobierno izquierdista argentino de Alberto Fernández.
Les platico: El BID es el banco de desarrollo regional más grande del mundo. Está integrado por 26 países de América y el Caribe más otras 20 naciones donantes que se benefician de los bienes y servicios que son financiados por dicho organismo.
El mandato del presidente es por 5 años, y puede reelegirse 3 veces. Cuatro lo han conducido hasta ahora: El chileno Felipe Herrera, el mexicano Antonio Ortiz Mena, el uruguayo Enrique Iglesias y el colombiano Luis Alberto Moreno, quien deja el puesto luego de 15 años.
Claver Carone nació en Miami, hijo de madre cubana y padre español y tiene el respaldo de Brasil, Ecuador, El Salvador y Jamaica.
Es un acérrimo enemigo ideológico de los Castro y como parte del gobierno de Trump, lideró la estrategia que tiene copado financieramente a Nicolás Maduro. Se le atribuye el despliegue de inteligencia que hace 10 días provocó el encarcelamiento de uno de los principales prestanombres de Maduro y el congelamiento de cuentas bancarias por cientos de millones de dólares del dictador venezolano.
Es un tipo echado para adelante, como los toreros españoles que hay en su estirpe paterna. En diciembre 2019 durante su visita como representante de Trump a la asunción del presidente argentino Alberto Fernández, no fue a la ceremonia del traspaso de poderes, cuando se enteró que ahí estaría Jorge Rodríguez, el ministro de Comunicación del régimen de Maduro.
Claver Carone declaró ese mismo día que no quiso compartir el espacio con un tipo que fue sancionado por el Departamento del Tesoro de EU y cimbró al escenario político internacional cuando dijo: “Queremos saber si Alberto Fernández va a abogar por las democracias o va a ser un apologista de las dictaduras”.
Para meterle más mocos al atole, el presidente argentino puso en frente del candidato de Trump, al principal asesor de su gobierno de izquierda, el mentado Béliz, cuyo palmarés a lo más que llega es haber sido gerente de varios bancos regionales de desarrollo.
Claver Carone es muy cercano al senador republicano por Florida, Marco Rubio, socio del financiero Paul Singer, integrante del influyente Comité de Relaciones Exteriores y presidente del Sub Comité de EU para el Hemisferio Occidental.
Este es el “Grupo Miami”, que opera desde la oficina 270 en la calle 83 número 7401 al sur oeste de ésta ciudad.
Desde aquí salió el siguiente tweet de Rubio, en español: “Esperaba que se pudiera redefinir la relación Estados Unidos-México como una asociación estratégica, no como una asociación de asistencia, como una alianza que atendiera nuestros retos comunes. Pero el inexplicable apoyo del nuevo gobierno (de López Obrador) a Maduro ha puesto todo esto en duda”.
El mensaje del senador se refería a la postura de la 4T —que no de México— al abstenerse de declarar ilegítimo al gobierno de Maduro. Otros países se opusieron a dicha resolución, como Nicaragua, Bolivia y uno que otro del Caribe. Esto fue en octubre 2019.
El 10 de enero pasado, los gobiernos de México y Argentina se abstuvieron de apoyar la resolución de la OEA que condenaba el uso de la fuerza contra de la Asamblea Nacional de Venezuela, cuando la dictadura chavista usó a los militares para impedir el ingreso al Palacio Legislativo, de Juan Guaidó y 100 diputados opositores que intentaron en vano evitar que el presidente interino —títere de Maduro— renovara su mandato en el Parlamento.
La gota que derramó el vaso se dio el 27 de junio pasado: México se abstuvo junto a otros 6 países de condenar en la OEA el nuevo golpe de Maduro que impide elecciones libres en Venezuela.
Argentina, Grenada, Guyana, Surinam, Trinidad y Tobago y Belice —junto a la 4T, porque insisto, este es un trafique que traen los izquierdosos lacayos que tienen embaucado a MALO— no apoyaron la resolución de la OEA que rechazó la elección inconstitucional de la dictadura chavista.
A favor de la resolución condenatoria votaron El Salvador, EU, Guatemala, Haití, Honduras, Jamaica, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay, Bahamas, Bolivia, Brasil, Canadá Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador y Venezuela, a través del representante de Guaidó, a quien la OEA reconoce como elemento activo.
Se ausentaron los clásicos aliados de Maduro: Nicaragua, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Antigua y Barbuda, Barbados y Dominica.
Con 21 votos a favor, 7 abstenciones y 6 países ausentes, la OEA rechazó y desconoció la ilegal designación del Consejo Nacional Electoral por parte del Tribunal Supremo de Justicia venezolano, y la ilegal designación de las directivas de los partidos políticos “Primero Justicia” y “Acción Democrática”.
Así, la OEA se sumó a la Unión Europea, EU, y los Grupos de Contacto Internacional y de Lima, en su exigencia a Maduro para que respete las prerrogativas de la Asamblea Nacional, que cese la usurpación de funciones y no interfiera en los partidos políticos independientes.
Y le advirtieron que debe liberar de inmediato a todos los presos políticos, incluidos los diputados de la Asamblea Nacional, uno de los cuales es mi amigo Juan Requesens, quien con un celular introducido subrepticiamente a la temible cárcel El Helicoide, me llamó para decirme que los están matando de hambre y exponiéndolos al contagio del COVID-19.
CAJÓN DE SASTRE
“¿A qué juegan MALO y su podrida 4T al abstenerse de condenar las resoluciones de la OEA contra Venezuela? ¿A qué le tiran las jaurías que lo veneran mesiánica y ciegamente? ¿No se dan cuenta que México se empina cada vez más? ¿Pretenden que Cuba, Venezuela, Nicaragua, Argentina y el inframundo del comunismo vengan a salvarnos después de que hayan mandado a La Chingada a lo que quede de éste endémico País”, dice la irreverente de mi Gaby, ya bien encabronada.
PLÁCIDO GARZA. Nominado a los Premios 2019 “Maria Moors Cabot” de la Universidad de Columbia de NY; “SIP, Sociedad Interamericana de Prensa” y “Nacional de Periodismo”. Es miembro de los Consejos de Administración de varias corporaciones. Exporta información a empresas y gobiernos de varios países. Escribe diariamente su columna “IRREVERENTE” para prensa y TV en más de 40 medios nacionales y extranjeros. Maestro en el ITESM, la U-ERRE y universidades extranjeras, de distinguidos comunicadores. Como montañista, ha conquistado las cumbres más altas de América.

