¡Ahhh! Nuestro glorioso Presidente.

Joe Biden expresó: Trato de iguales entre iguales, porque México y EEUU son iguales. Nunca más países de distinto nivel… siempre hemos superado nuestras diferencias.

¡Ahhh! ¡Tenía que ser la respuesta de nuestro gran Presidente oriundo de la Tierra del Nunca Jamás: Si a Porfirio Díaz le achacan el: “Pobre México, tan Lejos de Dios y tan Cerca de Estados Unidos”; que nuestro amado líder la recompone: México: Cerca de Dios y no tan lejos de EEUU…”, palabras más, palabras menos. ¡Ahhh! ¡Aquel Moctheuzomatzin, señor sobre todos los señores!

Aquel que se inclinó con respeto al paso del hombre rubio, Mister Trúm, su encomiable amigo, con el que a base de gritos, amenazas y escobazos, López terminó por sentir una admiración especial, y cuanta petición salía de la casa de Trump, López la cumplía.

Hoy, López ve displicente al Presidente Joe Biden, tal vez por ser un ‘pequeño Estadista’, respetuoso de la democracia pero al fin y al cabo Estadista de gran calado. Con Trump, López sí  se sentía a gusto, más a modo por desordenado, poco Estadista, y menos demócrata, ni republicano. Trump, un gran arengador de masas de tarados.

 

El Encuentro del lunes 1 de marzo

Si bien el trato fue amable en la reunión virtual entre ambos presidentes, también se notó una importante distancia virtual entre ambos mandatarios. Decentes pero con amistad fría. Para Biden demasiado en juego con el papel regional del subcontinente norteamericano.

Demasiados pasivos en las cuentas lopiztas frente al nuevo prelado estadounidense.

Por una parte López sabe que no reconoció cuando debió reconocer, el triunfo del presidente electo Biden. También López sabe muy bien que en su interior y en sus declaraciones, nunca condenó el intento de golpe de Estado del todavía Presidente Trump del 6 de enero.

El escenario físico de aquel lamentable día, la toma de la bastilla trumpista: El Capitolio.

La intención: ¡Vaya, nada importante! Un golpe de estado, incitar al asesinato del vicepresidente de EE.UU.  y apoderarse ilegítimamente de la reelección. Eso, aquí y en China se llama: Traición a la Patria. Eso es motivo de juicio histórico y condena que más temprano que tarde recaerá en el señor Trump.

López nunca quiso opinar al respecto, porque, —‘se trató de un proceso político de un país vecino amigo’—. Vecino, sí. País amigo, puede que. Proceso político, ¡Era un Golpe de Estado! Mínimo, mínimo, mínimo, tendría que haber llamado a consulta a la entonces Embajadora de México en EEUU, y declarar nuestro tlatoani que seguiría muy de cerca el intento de rompimiento democrático en aquel país. Pero algo se le hizo chicharrón en la sesera, no pudo conjugar, y bien callado se quedó.

 

El lunes, sí se abordaron temas de gran importancia

No nos extrañen las muecas de sospecha de un Biden con una ética política reconocida por demócratas y republicanos. Un hombre de conciliación. Con casi 50 años de experiencia política y de Estadista, en las esferas más altas de la nación más poderosa del Orbe. Ese Biden  expresó ambivalencia en sus caras frente al López, a distancia virtual, el lunes pasado. Sí Presidente López: Te la jugaste a que Trump ganaba el golpe de estado. Como si de un partido de béisbol se tratara.

Ahora, en cancha neutra, dijiste tonterías. Claro Biden sonrió con tu refrán porfirista.

Pero se rió de ti antes de comenzar el diálogo virtual, porque la propia Casa Blanca fue tajante, en voz de su vocera oficial: Ni una vacuna para México hasta que todos los estadounidenses estén vacunados.

Luego la manoletilla de Biden: que si la Virgen de Guadalupe, que si la buena voluntad, que ve a México como un igual, y no como alguien que está al sur de nuestra frontera…, que hay muchos temas que se tratarán en los próximos meses. Que la colaboración migratoria, de combate al crimen organizado en ambos lados de la frontera … Bla, bla, bla.

El remate de Biden al que no pudo responder mucho nuestro Xocoyotzin: “Te espero Andrés en mi Plan para una Revolución de Energía Limpia y Justicia Ambiental”.  ¿Entiendes Andrés? O te explico Federico…

Para ser iguales tenemos que cumplir con las mismas estrategias económicas, sociales, y ambientales. Para ser iguales hay que cumplir con todas y cada una de las reglas del T-MEC, y garantizar que se armará un Hub de cadenas de valor estratégico y económico de gran calado entre México, EEUU y Canadá. Para ser iguales tenemos que respetar las reglas, las leyes, los acuerdos, ofrecer seguridad física y jurídica a las empresas de los países matriz y huéspedes.

Si queremos ser iguales, tenemos que comenzar por acelerar el cambio de energías y de procesos de producción rumbo a economías verdes y circulares. Si queremos apoyos de EEUU y colaboración de tu a tu, ya basta de los juegos de yo con mis carcachas de plantas de energía, en un submundo que no corresponde a una nación como México.

México como país tiene todo el poder para desarrollar una economía energética de primer nivel, con energías limpias, con inversión pública, privada nacional y extranjera; con innovación. Tal y que generemos un Estado de Derecho que retome la senda del respeto y credibilidad por el que íbamos antes del 2019 y sobre todo, antes del 2013.

Todo eso dejó muy en claro el Presidente Biden, con muy pocas palabras.

Pero el equipo que ya armó para coordinar su mandato con México, no es de aficionados. Es  gente de reconocida capacidad profesional, altos estudios, y amplio conocimiento de México y del subcontinente latinoamericano.

Esta primera quincena de marzo el equipo de López se tiene que decidir: Por las buenas o por las malas, pero EEUU retoma el control del tablero estratégico global. No tienen pensado darle una década a México; vaya ni un lustro a nuestro país, para prepararse. Ya íbamos por buen camino. No van a dar plazos de gracia para que hagamos las paces con todas las negociaciones violadas, ni con los contratos no cumplidos.  Este mes de marzo, o México da color, o EEUU comenzará a apretar las tuercas y a demandar de gobierno a gobierno, y a autorizar las demandas entre empresas, sean de quién sean, en contra de CFE, de Pemex, o de quien resulte responsable.

 

Se acabó el tiempo

Sí. Muy poco sabemos de lo que se dijo en la reunión entre presidentes del lunes pasado.

Las caras de Joe Biden, las muecas, las expresiones anómalas, todo lo dijeron. No esperemos gritos, ni twitters, ni mentadas del presidente estadounidense. A eso se acostumbró López con Trump, un energúmeno que vive de la mentira y del fraude.

Biden es hombre de Estado. Nunca se enfrentará directamente con López. Pero López va a entender la política de los EEUU, más allá de las interpretaciones a modo de la 4T de lo que significa soberanía, esa soberanía 4tetista de la voluntad del pueblo…, aunque me friegue a mi compadre.

 

Índice de Progreso Social

  • El PIB sí es importante.
  • México 2020 y su población, bien amolados.

Por segundo año consecutivo, la organización México, ¿cómo vamos?, que dirige la dinámica Sofía Ramírez, presentó en conjunto con el Social Progress Imperative, el  Índice de Progreso Social (IPS) 2020, una evaluación integral del bienestar social estatal que toma en cuenta 55 variables y permite medir la eficacia con la que el éxito económico de un país se traduce en progreso social.

En la edición 2020, México no mostró un avance significativo respecto al año previo, lo que denota que el nivel de bienestar a nivel nacional no progresó.

Las 55 variables consideradas para el estudio se dividen en tres dimensiones:

  • Necesidades Humanas Básicas.
  • Fundamentos del Bienestar.
  • y Oportunidades.

A su vez se utilizaron 12 pilares —como Salud y Bienestar, Libertad Personal y de Elección, Inclusión, y Seguridad Personal—. Los datos recabados de fuentes oficiales entre 2017 y 2020, muestran el panorama en México previo a la llegada de la pandemia de Covid-19, al tiempo que reafirman la disparidad regional.

Estados como Nuevo León, Yucatán, Coahuila y CDMX se vuelven a colocar dentro de las 5 primeras posiciones del Índice, mientras que Chiapas, Oaxaca y Guerrero vuelven a ocupar los últimos 3 lugares.

 

Lo que nos viene a decir el IPS

  1. El Índice de Progreso Social confirma que existe una correlación entre los ingresos de un estado (medidos por el PIB per cápita) y el bienestar social de su población.
  2. Aún más, demuestra que los estados no siempre aprovechan sus recursos de manera eficiente.
  • La CDMX, por ejemplo, tiene el mayor PIB per cápita (sin minería petrolera), pero ocupa el quinto lugar en el ranking de progreso social.
  1. Finalmente, existe una relación directa entre el Índice de Progreso Social y el nivel de pobreza laboral en cada estado.
  2. A nivel estatal, los resultados indican que 22 entidades no mostraron avances ni retrocesos en el puntaje, con variaciones menores al 1% en su calificación.
  3. Ocho mostraron incrementos en el puntaje, resaltando Baja California Sur que pasó de la posición 25 a la 13, Tlaxcala de la 26 a la 19 y Sinaloa de la 7 a la 2.
  • En contraste, dos estados tuvieron disminuciones en el puntaje respecto al año previo, Querétaro se colocó en la posición número 7 y Zacatecas en la 26, cuando en 2019 sus posiciones fueron la 2 y la 23 respectivamente.

 

Conclusiones del IPS

  • El IPS permite identificar los retos que enfrenta cada estado y hacer un diagnóstico puntual de las necesidades a nivel regional.
  • Según los resultados del Índice de Progreso Social (IPS) 2020, México no mostró un avance significativo, lo que denota que el nivel de bienestar a nivel nacional no progresó.
  • En términos del bienestar social, 18 estados se ubican por encima del promedio nacional, incluyendo Nuevo León, Sinaloa, Yucatán y Coahuila; 14 estados se ubican por debajo, entre ellos Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Veracruz. El estudio en formato PDF puede descargarse en mexicocomovamos.mx/progresosocial

 

Efrén Flores es licenciado en Economía. Durante más de 35 años se ha dedicado a la comunicación en medios electrónicos e impresos, con temas financieros, económicos, empresariales, estratégicos, RSE, PyMEs, y nuevas tecnologías que revolucionan a nuestro mundo. Es conferencista en México y en EEUU. Las opiniones expresadas en este artículo son exclusivas del autor. Efrén Flores nunca ha pertenecido a Partido Político alguno.