Año con año, día con día, los mexicanos pagamos impuestos con el objetivo de lograr un servicio público eficiente que responda las exigencias de la gente, sin embargo, llevamos cerca de 3 años pagándole un salario a un presidente, que se dedica dividir a los mexicanos, a denostar el trabajo periodístico y a mentir con descaro.
Desde aquí le reafirmo al presidente López Obrador el mensaje que le envié desde el Senado de la República. Él dijo que la oposición votó en contra de la reforma al artículo cuarto constitucional para garantizar que los adultos mayores, las personas con discapacidad y jóvenes en situación de pobreza tengan acceso a un programa social y eso es totalmente falso.
Yo he votado desde la entonces Asamblea Legislativa, después en el Congreso Constituyente de la Ciudad de México y ahora desde el Senado de la República a favor de los programas sociales.
Cuando menciona que en el pasado se hacían conferencias “contramañaneras” desde un hotel, quiero dejarle muy claro que hoy este ejercicio democrático se realiza desde el Senado, porque soy una representante del pueblo de México y por supuesto que vamos a aguantar, porque lo que México ya no aguanta es a un presidente mentiroso.
Del 1 de diciembre de 2018 a mayo de este año, se tienen registradas 86 mil 370 víctimas de homicidio doloso; Vivimos un repunte en el número de contagios por Covid-19; Somos uno de los países con más altos índices de impunidad, donde 92 de cada 100 delitos se quedan sin castigo y; Los precios del gas, gasolina, luz y hasta de la tortilla han sufrido un incremento que afecta los bolsillos de las familias mexicanas.
Desde el Senado de la República continuaremos exigiendo que haga su trabajo. La naturaleza de la división de poderes es ser un contrapeso, no simples aplaudidores y espectadores.
Al presidente le caló la contramañanera, por eso hasta me mencionó en su show de mentiras matutinas. Lo digo fuerte y claro: seguiré una a una, palabra por palabra de sus mentiras las cuales estaré exhibiendo todos los lunes. Es evidente que no se cansa de mentir, y yo no me cansaré de exponerlo.