No cuentan con el debido respaldo

En los últimos días la inquietud de las empresas mexicanas se ha dejado sentir aún más ante el escenario de una doble recesión; lo anterior pone alerta a los empresarios mexicanos, pues significaría un menor crecimiento económico y la disminución de proyectos de inversión. Todas las compañías mexicanas se han visto forzadas a revisar sus estimaciones de crecimiento (entre las más afectadas están las exportadoras), pues la volatilidad también afecta a los consumidores, quienes comienzan a recortar gastos y compran menos.
En México existen aproximadamente 4 millones 15 mil unidades empresariales, de las cuales el 99.8% por ciento son pequeñas y medianas empresas. Las cuales concentran el 78.5% del personal ocupado y participan dentro de las actividades económicas de la siguiente forma: 47.1% en servicios, 26% en el comercio, 18% en la industria manufacturera y 8.9% en el resto de las actividades.
En el caso de México, generan el 52% del producto interno bruto y contribuyen con el 72% de los empleos formales, sin embargo, siendo tan necesarias, todavía no son suficientemente comprendidas y apoyadas.
Por la importancia de las pequeñas y medianas empresas, es importante fomentar y promover programas y herramientas para mejorar su entorno económico y apoyarlas directamente, con el propósito de crear las condiciones que contribuyan a su establecimiento, desarrollo y consolidación.
Según Naciones Unidas, a pesar de los esfuerzos para apoyar a las pequeñas y medianas empresas en México, todavía existen retos que amenazan la supervivencia de los nuevos negocios.
Hacienda acordó incrementar en 300 millones de pesos el fondo de pequeñas y medianas empresas, que se suma a los 2 mil 600 millones que tiene actualmente; permitiendo detonar créditos por aproximadamente 7 mil 500 millones de pesos.
Las estrategias presentadas incluyen, además del incremento monetario, el relanzamiento del programa de garantías bursátiles de Nafin, el anuncio del programa Nafin/Concanaco-Servitur y nuevos mecanismos de apoyo a través de las uniones de crédito.
Por su parte, la Asociación de Bancos de México prevé destinar hasta 13 mil millones de pesos para apoyar a las pequeñas y medianas empresas.
La importancia del esfuerzo del gobierno federal radica en la capacidad que se tenga de favorecer el alineamiento de todos los elementos tanto económicos como de estrategia para poder efectivamente llegar a las empresas; en este sentido, es importante mencionar que debe ser un esfuerzo conjunto y de dos vías, pues las empresas también tienen la responsabilidad de acercarse al gobierno federal para poder tener acceso a estos recursos y evitar que estos se conviertan en una expectativa no alcanzable.
jmillanb@grupocoraza.com


