Por Gabriel Gutiérrez
La doctora Martha Durand, especialista del Departamento de Biología de la Reproducción del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, señala que pocos adolescentes usan anticonceptivos al empezar a tener sus primeras relaciones sexuales, ni siquiera los anticonceptivos de emergencia (con sustancias como el levonorgestrel), principalmente por la falta de información de estos fármacos y sus bondades.
Asimismo, señaló cuáles son las consecuencias cuando una mujer de 19 años o menos queda embarazada sin haberlo planeado.
Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006
– 14.4% de adolescentes de 12 a 19 años ha iniciado vida sexual.
– De ellos, 56.6% de las mujeres y 29% de los hombres no utilizaron algún método para el control de la fertilidad durante su primera relación sexual.
– La edad promedio para el inicio de relaciones sexuales es de 15.9 años.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de la Juventud 2005:
– 46.1% de los jóvenes entre 12 y 19 años no utilizan actualmente algún método anticonceptivo.
– 12.7% de los jóvenes de entre 12 y 29 años han utilizado anticoncepción de emergencia.
Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2009
39.1% de las mujeres de 12 a 19 años alguna vez han estado embarazadas.
De ellas, 19.2% han vivido más de un embarazo.
Consecuencias
– Las madres adolescentes se atrasan aproximadamente dos años con respecto a su grupo de edad para completar sus estudios.
– Las mujeres que tienen un bebé durante sus años de adolescencia tienen mayor probabilidad de vivir en la pobreza.
– Los bebés nacidos de adolescentes tienen una probabilidad de dos a seis veces más de tener bajo peso al nacer que aquellos cuyas madres tienen 20 años o más. La prematuridad juega el mayor papel en el bajo peso al nacer, pero el retraso en el crecimiento intrauterino (crecimiento inadecuado del feto durante el embarazo) también es un factor.
– Las niñas que nacen de madres adolescentes tienen más probabilidad de convertirse en madres adolescentes igualmente y los niños varones tienen una tasa superior al promedio de ser arrestados y encarcelados.
– Tener el primer hijo durante la adolescencia incrementa las probabilidades de que la mujer tenga en general más hijos*.
– El embarazo en la adolescencia se asocia con mayores tasas de morbilidad y mortalidad, tanto para la madre como para el niño.
– Las adolescentes embarazadas tienen un riesgo mucho mayor de morir o sufrir complicaciones médicas graves como: placenta previa, hipertensión inducida por el embarazo, parto prematuro, anemia grave.
– Las madres adolescentes tienen más probabilidad de mostrar comportamientos que ocasionen riesgos al bebé como inadecuado control prenatal, infecciones o dependencia de sustancias químicas.
Cómo evitarlo
La Organización Mundial de la Salud señala que proporcionar información apropiada y oportuna a los jóvenes favorece la reducción de los resultados de un embarazo no planeado y de la transmisión de enfermedades sexuales.
La anticoncepción de emergencia puede ser una herramienta útil ante una relación sexual no prevista en la que no se utilizó algún método para controlar la fertilidad. Sin embargo, no se debe utilizar como un método regular, sino como una oportunidad para prevenir un embarazo no planificado e iniciar el uso del anticonceptivo regular más conveniente para la mujer, en caso de que tenga una vida sexual regular.
*Información de los Institutos
Nacionales de Salud de Estados Unidos.


