Este martes, la Nasa divulgó los resultados de una investigación basada en imágenes satelitales, en las que se observa un enorme retroceso de la capa de hielo en el Artico, durante septiembre, mes de referencia anual para medir la extensión helada y el alcance del deshielo ya que, a partir de ahora, hacia el invierno, aumenta de nuevo la superficie de hielo.

El deshielo del Ártico en 2011 se quedó muy cerca del récord histórico de 2007, según los datos de la NASA. La extensión helada media en el mar septentrional en el mes de septiembre ha sido de 4.61 millones de kilómetros cuadrados (con un mínimo de 4,33 millones el 9 de septiembre). Esto significa que la cobertura de agua helada este año ha sido 2.43 millones de kilómetros cuadrados inferior a la media de 1979 a 2000.

Joey Comiso, científico de la NASA, comenta: “El hielo marino no sólo está reduciéndose, sino que lo hace a mayor ritmo”… El hielo más viejo, más grueso, se reduce más rápido que el resto, aumentando la vulnerabilidad de la cubierta helada”.

Los estudios de los últimos años proyectaban que para el año 2100 el Ártico perdería por completo la capa de hielo durante en el verano. Sin embargo, las evidencias de que el calentamiento global impacta más de lo esperado podrían conducir a los científicos a acortar ese pronóstico.