Se pierde el avión más veloz jamás construido

No bien y los militares norteamericanos habían lanzado este jueves al espacio una de las más grandes maravillas tecnológicas, el Falcon HTV-2, el avión más rápido jamás construido, capaz de alcanzar velocidades hasta veinte veces mayores a la del sonido (13 mil kilómetros por hora), cuando la nave se descontroló a los 36 minutos, en su fase de vuelo, y se precipitó al Océano Pacífico sin dejar rastro.