Firmeza y convicción de López Obrador

El 7 de abril de 2005, el Pleno del Congreso de la Unión determinó, por mayoría de votos, desaforar a Andrés Manuel López Obrador, a la sazón jefe de Gobierno del Distrito Federal, consumándose así la determinación del panista Vicente Fox Quesada y sus aliados momentáneos, para intentar frenar la imparable simpatía que el político tabasqueño concitaba en función de una política de fortalecimiento del Estado de bienestar fincada en el principio de “por el bien de todos, primero los pobres”.