Conforme a lo dispuesto en la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, la campaña electoral debe ser el conjunto de actividades lícitas, sin calumnia ni denigración, que lleven a cabo los partidos, coaliciones y candidatos, con registro otorgado por el INE, para conquistar el voto favorable de los ciudadanos. Los actos de campaña son reuniones públicas, asambleas, marchas y todas las actividades por las que los candidatos, partidos y coaliciones se dirigen a los ciudadanos, para promover sus candidaturas; en tanto que la propaganda electoral es el conjunto de escritos, publicaciones, imágenes, grabaciones, proyecciones y expresiones lícitas que, durante la campaña electoral, deben producir y difundir los partidos, coaliciones, candidatos registrados y simpatizantes, para presentar a los ciudadanos las candidaturas.

Todas las actividades realizadas en la campaña electoral deben ser conforme a la ética y el derecho; deben tener como objetivo propiciar, ante los electores, la exposición, desarrollo y discusión de los programas y acciones propuestos por los partidos políticos, en sus documentos básicos y, especialmente, en la plataforma electoral que, para cada elección, debieron solicitar su registro previo al Consejo General del INE.

En términos de la Ley General de Partidos Políticos, los documentos básicos de los partidos son su declaración de principios, programa de acción y estatuto.

La declaración de principios debe contener, fundamentalmente, las líneas directrices o bases ideológicas del partido, tanto en el aspecto político, como económico y social; con la precisión de que asume el deber de llevar a cabo sus actividades por medios pacíficos y democráticos; en general, que el partido actuará conforme a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanen.

En su programa de acción, el partido político debe establecer, conforme a la moral y el derecho, las vías y medios para alcanzar sus objetivos; para formar ideológicamente a sus militantes y capacitarlos para su participación activa y eficaz en los procedimientos electorales; se deben proponer políticas públicas para resolver los problemas nacionales, con la finalidad de demostrar preparación para el ejercicio del gobierno, para el caso de obtener el triunfo en la elección de representantes populares, que ejercerán la soberanía.

Finalmente, en su estatuto, el partido debe establecer su normativa jurídica interna, con base en la Constitución federal, el derecho convencional internacional, la legislación y jurisprudencia aplicable, los usos y costumbres, con el fin de dar certeza jurídica al Estado, a la ciudadanía, a sus militantes y simpatizantes, sobre su denominación, emblema, color o colores, estructura orgánica, derechos y deberes de los militantes, procedimientos de afiliación, elección de integrantes de sus órganos internos, postulación de candidatos a cargos de representación popular, infracciones y sanciones, medios de defensa intrapartidista y, en general, toda la normativa interna para regir sus actividades como partido político, como persona, con su característica especial de ser ente de interés público, facilitador del acceso de los ciudadanos al ejercicio del poder público.

Estos documentos básicos deben ser el sustento de la plataforma electoral, que los partidos deben presentar al Consejo General del INE para su registro, para la elección correspondiente; la campaña electoral de los partidos y sus candidatos debe estar sustentada en la plataforma electoral registrada, respetando siempre a las instituciones, a los demás partidos, a los otros candidatos, a los ciudadanos y a la población en general.

Este es el deber ser. Califique, amable lector, el mundo del ser…