La educación es la manera en que dejamos lo salvaje y nos construimos como personas, nos da la oportunidad de diseñarnos y diseñar nuestro entorno gran parte de nuestra vida.

Se estima que en los próximos años más de la mitad de los trabajadores requerirá formación y capacitación en áreas científicas y de tecnológicas, especialmente las relacionada con el análisis de datos, el desarrollo de software y aplicaciones de internet de las cosas, comercio digital y redes sociales.

Las tecnologías emergentes estarán en el centro de los modelos educativos y de capacitación laboral. La combinación de clases en línea y sesiones presenciales es cada vez más frecuente y exitosa.

Los objetivos más importantes son la empleabilidad y la satisfacción personal, es decir, que quien estudie esté convencido que aprende, que mejora como persona y que a la vez logre un empleo digno y bien remunerado.

La temprana vinculación con el mercado laboral es una de las condiciones que permiten el logro de una educación exitosa, las alianzas estratégicas empresas líder a nivel local, nacional e internacional son parte de los nuevos modelos educativos.

El uso de modelos híbridos que combinan los cursos presenciales con el trabajo en equipo y la utilización de plataformas de apoyo individual y grupal permiten además diseñar trayectos a la medida de las necesidades que van desde el individuo hasta las del país y del mundo.

Estos modelos aseguran además altas tasas de terminación con una eficiencia terminal superior al 70 por ciento.

La flexibilidad de estos modelos permite además la apertura de nuevas carreras “no convencionales” basadas en la combinación de prácticas en empresas formadoras, del tipo de la gran tradición alemana en educación, en las que se mantiene el trabajo en equipo, la enseñanza en el aula y el uso de las plataformas digitales, pero se actualizan de manera permanente los contenidos y las competencias que los estudiantes deben alcanzar, permitiendo una formación profesional acorde con la demanda real del mercado laboral.

Para el próximo año, el mercado de la ciencia de datos se valora en 47 mil millones de dólares y para 2030, se podrían agregar 13 billones de dólares a la economía global como resultado de la digitalización, la automatización y la inteligencia artificial. Por otra parte, se estima que, dentro de los próximos 25 años, más de la mitad de los trabajadores requerirá formación y capacitación permanente debido a la aceleración de los cambios en ciencia y tecnología, especialmente en áreas como el análisis de datos, el desarrollo de software y apps, y en e-commerce.

China ha iniciado con un megaproyecto de educación inteligente que incluye además el uso de la Inteligencia Artificial para la enseñanza, es decir que en lugar de tener un maestro humano los jóvenes tienen como profesor a un robot que diseña, a la medida, por así decirlo, los contenidos y la velocidad con que se deben aprender de manera individual para cada alumno. Los éxitos del programa se han reflejado especialmente en aquellos casos en los que los estudiantes tenían dificultades con las ciencias o las matemáticas, logrando que los puntajes subieran hasta en un 70 por ciento.

Diez millones de estudiantes en China están utilizando hoy día la inteligencia artificial para aprender. Este es probablemente el experimento mas interesante del mundo en educación.

China no lo planeó mucho, sencillamente puso manos a la obra. Bien haríamos los mexicanos en planear menos y hacer más.