Este 27 de junio último celebramos el sexagésimo noveno aniversario de Siempre! Presencia de México, el semanario fundado por don José Pagés Llergo para afirmar la libertad de expresión como baluarte de la democracia, forma moderna de ejercicio del poder público sujeta a valores, principios y normas. Bajo la idea de hacer del ejercicio de la libertad el vehículo esencial para su pervivencia y su florecimiento, surgió un espacio periodístico para la expresión del pensamiento plural sin más cortapisa que la responsabilidad ética por lo que se escribe y publica.

Una fotografía y sus implicaciones para el imaginario colectivo de la Nación trajeron consigo que la dimisión a El Mañana de nuestro fundador fuera la motivación para ensanchar la expresión libre y la reflexión crítica de la sociedad mexicana de ese tiempo -tan sólo unos años después de la cintura de la centuria pasada-, para beneficio de los tiempos por venir.

Al salvaguardar y custodiar la libertad de expresión y la libertad de imprenta para los profesionales del periodismo que hicieron posible el nacimiento de Siempre!, protegieron y garantizaron el ejercicio de esos derechos para futuras generaciones de comunicadores y su contribución a que el pensamiento y la deliberación informados nutran la convivencia democrática en nuestro país.

Si el Estado moderno es la formación política comprometida con la organización del poder público de la comunidad a través de la atención equilibrada de los valores de la libertad, la igualdad y la justicia, la posibilidad efectiva de pensar con base en el acceso a la información y al conocimiento sobre las ideas y los hechos, el derecho a hacer público este pensamiento y a hacerlo sin sujetar la voluntad más que a la propia conciencia, son los medios esenciales para asegurar la práctica auténtica de esos valores en la sociedad y frente al poder.

En el mundo de las libertades y los derechos de las personas no cabe afirmar que compiten unas u otros, o que uno u otro antecede a los demás. Sabemos que son interdependientes y en expansión progresiva porque la dignidad humana impulsará siempre su ampliación y crecimiento. Sin embargo, las libertades de pensamiento, de información y de expresión están en la raíz del control del poder público. No del control orgánico -obvio-, pero sí de una parte inmaterial de su sustento. Son fuente de la evaluación social de la cosa pública que alimenta las reflexiones y las acciones de los controles formales. Su aportación a la salvaguarda de las libertades de las personas frente al poder público y los agentes esenciales del poder no puede subestimarse.

Cuando surge Siempre! estamos ante la defensa de la libertad de expresión, pero también de un ejercicio libertario para afirmar el derecho a informar y a opinar para formar opinión. Es el momento en el cual un grupo de periodistas excepcionales hizo a la sociedad mexicana un servicio que sigue dando frutos.

Justo es reconocer a Rosa Castro, José Alvarado, Antonio Arias Bernal, Vicente Ortega Colunga, Francisco Martínez de la Vega, Indalecio Prieto, Antonio Rodríguez, Renato Leduc, Nemesio García Naranjo, Rafael Solana, Vicente Lombardo Toledano, Roberto Blanco Moheno, Gerardo de Isolbi, Álvaro González Mariscal, Hugo A. Díaz, Luis Gutiérrez y González, Manuel Madrigal y Salvador Zapata; una vibrante constelación de la diversidad del pensamiento de aquella época, bajo el capelo del talento de cada quien para una actuación colectiva que trascendió.

Como todo derecho humano, el de la expresión libre se presenta y se fortalece con su ejercicio cotidiano, perseverante y tenaz, y con la afirmación de la crítica fundada en la independencia del poder. En tiempos donde los medios públicos de comunicación política eluden la pluralidad y se transforman en altavoces de la narrativa del poder presidencial, doña Beatriz Pagés Rebollar honra a su estirpe y mantiene el legado de ejercer la libertad de expresión para preservar las libertades de las personas frente al poder público.

Las libertades se conquistan, se ejercen, se preservan y se ensanchan ante quienes pueden conculcarlas o siquiera limitarlas, porque como lo expresara Woodrow Wilson en 1912: “La libertad nunca ha venido del gobierno. La libertad siempre ha venido de quienes están sujetos al gobierno. La historia de la libertad es la historia de la resistencia. La historia de la libertad es la historia de las limitaciones al poder gubernamental, no su incremento.”

En ese espíritu se enmarca el nacimiento de Siempre! y su trayectoria hasta el presente, que puede haber estado en la mente de Alejandro Arias Bernal para incorporar la figura del Quijote en la portada del primer año de la revista en 1954. Es el defensor de una idea en contra de todas las adversidades; es la personificación del ideal imaginado, al grado de hacerlo vivencia y regir la conducta para alcanzarlo. Así, la idea de la libertad de expresión se sobrepone a las tentaciones y a los embates del poder, pero no como un asunto personal o individual sino como una contribución al bienestar de la comunidad.

Y porque existe, además, una relación dialéctica entre la libertad de expresión y el desarrollo de una sociedad de personas libres: la libre circulación de las ideas, de la crítica y de las opiniones fortalece las libertades de quienes integran esa comunidad. Pensar con libertad es el sustento de actuar con libertad y actuar en ejercicio de las libertades propias es encontrar el límite de las libertades y derechos de los demás personas. La libertad de expresión es un vehículo natural para el ejercicio responsable de las libertades de todo tipo, pero destacadamente de las políticas.

En el régimen democrático la libertad de expresión y la libertad de prensa son ámbitos que custodian el pluralismo y la convivencia de ideas distintas para resolver los problemas de la comunidad. Son el vehículo para advertir las pulsiones autoritarias y denunciar las inclinaciones autocráticas y totalitarias. Son libertades cuyo ejercicio hace de la práctica de argumentar, de la voluntad de persuadir y del propósito de postular las actitudes y acciones para la ciudadanía, el ámbito del debate público y la arena idónea para politizar las cuestiones de interés público que requieren solución con el vigor de la sociedad.

Enhorabuena por un aniversario más de Siempre! En libertad y por y hacia las libertades a través de la expresión libre.