Guerrero vuelve a teñirse de sangre. No solo se trata de los más de 18 asesinatos ocurrido en los últimos días sino de hechos de violencia en lo que participó el cartel de “La Familia Michoacana” sino también de los protagonizados por los alumnos de la escuela normal rural Isidro Burgos de Ayotzinapa y que podrían derivar en una crisis política.

Ni la mayor presencia policiaco militar o la instalación de Bases de Operación Mixtas (BOM) y de agencia de ministerio público inciden en una disminución de los hechos de violencia y asesinatos y mucho menos en la percepción de seguridad de loa habitantes.

El cuerpo de Samuel Ávila Marín, alías “El Vago”, reo que fue rescatado la semana pasada por un comando armado del penal de Coyuca de Catalán, en la Tierra Caliente, fue encontrado sin vida sobre la carretera federal Iguala-Altamirano a media noche del 11 de diciembre junto con un mensaje escrito en una cartulina, en el cual el asesinato se lo acreditó un hombre que se identificó con el apodo de “El Borrego” y como integrante de la organización delictiva “La Familia Michoacana”.

Un grupo de 80 hombres armados vestidos con ropa tipo militar irrumpieron en el penal, desarmaron a los custodios y se llevaron a “El Vago” el 7 de diciembre. El reo había sido ingresado al reclusorio de Coyuca de Catalán, un día antes, acusado por el delito de secuestro.

“El Borrego” es señalado como el líder de los criminales que ingresaron el 10 de diciembre a la comunidad de El Durazno, donde asesinaron a siete pobladores, entre ellos un menor de edad. Existen registros de que el mismo hombre fue detenido en diciembre de 2017. En ese momento, el entonces fiscal general estatal, Xavier Olea Peláez, lo identificó como el segundo al mando de la organización criminal “Los Tequileros”.

Los datos recabados indican que el grupo de 80 encapuchados retuvo al director del penal, desarmó a los custodios y tomó el control del penal estatal y salió de allí fácilmente. Los hechos ocurrieron en 10 minutos.

Existen versiones de que, además pudieron escapar ocho internos más, quienes aprovecharon el momento de desconcierto cuando los 80 encapuchados tomaron el control del penal en la sierra de Guerrero, sin embargo, ese dato no ha sido confirmado.

También se tiene documentado que la liberación de ‘El Vago’ en Coyuca ya ha ocurrido en otras cárceles de diferentes estados de México, por la falta vigilancia en las prisiones o porque hay miembros coludidos.

En redes sociales desde el 12 de diciembre se viralizó un video que muestra a “El Vago” en un interrogatorio y aparece sentado en una silla blanca a la intemperie, rodeado por camionetas y más de una docena de sujetos que portaban armas de fuego (algunos también contaban con equipo táctico estilo militar), en sus repuestas “El Vago”, confirmó su participación en la masacre de San Miguel Totolapan ocurrida el 6 de octubre de este año.

El 10 de diciembre en la comunidad de El Durazno, un grupo de siete personas fueron citados para dialogar acerca de la división de parcelas por desacuerdos entre vecinos, pero fueron atacados por civiles armados con fusiles AK-47 y R-15.

La versión de fuentes federales y estatales, fue que los hombres con armas sacaron a las víctimas de sus domicilios particulares y los llevaron a la cancha de la Escuela Primaria “Ignacio Zaragoza” para una “reunión pacífica”.

Los pobladores indican que los sicarios recorrieron el pueblo y en la calle principal rociaron con gasolina a un hombre a quien posteriormente le prendieron fuego.

Pobladores de la zona, al día siguiente, realizaron bloqueos en la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo para exigir justicia por la masacre y pidieron garantías al gobierno para las familias de “El Durazno” que no han podido ser reubicadas.

Las víctimas mortales, identificadas como Bonifacio “N”, Bladimir “N”, José “N”, Isidro “N”, Fernando “N”, Daniel “N” y un menor de edad del que no se reveló su nombre. De igual manera se investigan las lesiones en contra de Martín “N”.

 

Normalistas, agresiones

Estudiantes de la normal “Isidro Burgos” habrían agredido con piedras y bombas molotov a elementos de la Policía Estatal, quienes iban a bordo de dos patrullas sobre el libramiento a Tixtla resultando un elemento lesionado y cuatro más retenidos.

Los hechos se registraron luego de una movilización de los normalistas al cumplirse 11 años de la muerte de los estudiantes Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús durante un desalojo en la Autopista del Sol en Chilpancingo.

Al día siguiente comenzó a viralizarse un video y los normalistas aseguraron que ellos fueron los agredidos por los elementos policiacos, versión que rechaza la secretaria de Seguridad, pero vuelve a alinear a ciertos grupos en torno a normalistas y politizar el caso.

El 9 de diciembre, unos 100 estudiantes irrumpieron en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado, causando destrozos y lanzando bombas molotov, quemaron colchonetas. realizaron pintas de consignas, y destruyeron equipo de cómputo.

La FGE abrió una carpeta de investigación contra quienes resulten responsables por los delitos de daños a la propiedad ajena y tentativa de homicidio en contra de Eliel “N”.

El 13 de diciembre, la autodenominada Policía Comunitaria Tecampanera, transportistas y maestros de la región Norte bloquearon la carretera federal Iguala-Altamirano en Teloloapan para exigir la presencia de las fuerzas armadas y que se garantice la seguridad en Arcelia y en ese municipio lo cual obligó a la suspensión de todas las actividades en la cabecera municipal la cual quedó incomunicada con Iguala, Arcelia y Apaxtla.