En su visita a la ciudad de New York, la precandidata de la coalición Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, se reunió tanto con la comunidad migrante como con estudiantes de universidades privadas.

La senadora con licencia sufrió en su visita la embestida de un puñado de manifestantes que arremetieron en su contra, llamándola incluso “ratera”. Independientemente de que ese tipo de expresiones llenas de odio, de coraje, son inadmisibles, al parecer no fueron espontaneas, sino provocadas por terceros interesados en perjudicar a Xóchitl Gálvez.

A decir de Idelfonso Guajardo, exsecretario de Economía y quien acompañaba a la candidata en su gira, este grupo de manifestantes fue enviado por militantes del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), concretamente señaló a su dirigente, Mario Delgado.

Suponiendo sin conceder que hayan sido enviados los manifestantes por Morena y su líder, habla muy mal de ellos al tratar de boicotear los eventos de la precandidata presidencial, alimentando un ambiente ya de por si hostil y cargado de odio, lo que lleva a polarizar aún más a una sociedad muy dividida desde comienzos de la presente administración.

No son capaces los partidos de llevar a cabo sus campañas sin denostar, sin injuriar, tienen que hacer uso de este tipo de recursos deleznables y que en nada abonan a la construcción de una democracia.

Lo que deberían hacer es contrastar sus propuestas para que la sociedad compare, se informe y tome una decisión de cara a las elecciones de 2024. La gente ya está harta de las peleas de los políticos, cuando en nuestro país hay demasiados pendientes que no nos dejan avanzar.

Para justificar este tipo de manifestaciones, Mario Delgado afirma que el pueblo de México no los quiere, y recordó que millones de compatriotas se vieron orillados a migrar a los Estados Unidos por culpa de los malos gobiernos del PRI y del PAN. Que descaro y cinismo del líder morenista. El problema persiste a la fecha, miles de mexicanos han tenido que cruzar las fronteras ante la falta de oportunidad en el país que los vio nacer.

Es una realidad que siguen sin generarse las oportunidades suficientes en México, lo cual obliga a muchos mexicanos a buscar una mejor vida en los Estados Unidos. Debería el líder morenista de ocuparse en presentar propuestas de solución para mitigar este fenómeno y así lograr que nuestros paisanos tengan un trabajo bien remunerado en nuestro país.

Los actos de que fue victima Xóchitl Gálvez solamente generan violencia, además de dar una pésima imagen de México en el extranjero. Se requiere un debate de altura entre los candidatos, en donde predomine el interés superior de la sociedad, y se deje de un lado de una vez por todas las descalificaciones.

Ya basta de sembrar odio, con discursos que fomentan la violencia, la descalificación y el debate estéril, exijamos como sociedad una discusión con argumentos y razones que nos permitan visualizar con claridad hacia donde vamos y que México queremos para los próximos años.

Lo que hoy necesitamos saber entre otras cosas, es cómo vamos a erradicar el flagelo de la inseguridad, cómo lograremos que ningún mexicano padezca el desabasto de medicamentos y cómo vamos a erradicar de nuestra sociedad la corrupción. Así que dejemos de perder el tiempo con peleas inútiles que en nada benefician a la sociedad mexicana.

 

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