Ayotzinapa una traición de AMLO. La peor de todas.

Vuelco inesperado produjo el supuesto atentado contra Donald Trump, Joe Biden renunció a la candidatura presidencial por el Partido Demócrata y propuso para suplirlo a Kamala Harris.

Es muy interesante lo que escribió ella, en su libro Nuestra Verdad publicado el 2021 por Ediciones Península en Barcelona:

“Era senadora electa de Estados Unidos, la primera mujer negra de mi estado y la segunda en la historia del país en conseguir ese puesto. Me habían elegido para representar a más de treinta y nueve millones de personas, más o menos uno de cada ocho estadounidenses de todos los orígenes y clases sociales. Era, y es, un gran honor y una lección de humildad.

“Yo había escrito un discurso que daba por hecho que Hillary Clinton se convertiría en nuestra primera presidenta. Mientras me dirigía al estrado a saludar a mis simpatizantes, olvidé ese borrador. Miré a la sala. Estaba a rebosar, desde la platea hasta los palcos. Muchos estaban en estado de shock mientras veían los resultados del escrutinio del país.

“Dije a la multitud que teníamos una tarea por delante. Les dije que había mucho en juego. Teníamos que comprometernos a unir juntos nuestro país, a hacer lo necesario para proteger nuestros valores e ideales fundamentales…

“Yo sabía una cosa: había terminado una campana, pero iba a empezar otra.

“Una campana que nos pedía que nos alistáramos. En esta ocasión, la batalla era por el alma de nuestra nación.

“En los años sucesivos, hemos visto una Administración que se entiende con supremacistas blancos dentro de nuestras fronteras y queda bien con dictadores fuera de ellas; que arrebata a niños pequeños de los brazos de sus madres en una esperpéntica violación de los derechos humanos; que reduce drásticamente la presión fiscal sobre las empresas y los millonarios mientras ignora a la clase media; que desbarata nuestra lucha contra el cambio climático; que sabotea la sanidad y pone en peligro el derecho de las mujeres a controlar su propio cuerpo; todo ello mientras parece atacar a todo y a todos, incluida la idea misma de la libertad e independencia de la prensa.

“Somos mejores que eso. Los estadounidenses sabemos que lo somos. Pero vamos a tener que demostrarlo. Vamos a tener que luchar por ello”

Estas palabras la definen como una mujer comprometida con sus orígenes, se autocalifica como una mujer negra, defiende el derecho de las mujeres a controlar su propio cuerpo, en clara alusión al derecho a abortar, rechaza la política de Trump favorecedor de los grandes millonarios y desprecio a la clase media. Rechaza a Trump por su postura contra el cambio climático, su “supremacismo blanco” y su apoyo a las dictaduras.

Kamala Harris de padre jamaicano y madre hindú, ambos intelectuales universitarios, nos dice:

“El 4 de julio de 1992, uno de mis héroes y fuente de inspiración, Thurgood Marshall, pronunció un discurso que resulta de lo más pertinente.

“—No podemos hacer como los avestruces —dijo—. La democracia no puede prosperar en el terror. La libertad no puede abrirse paso entre el odio. La justicia no puede echar raíces en la rabia. Estados Unidos debe ponerse a trabajar. Debemos discrepar de la indiferencia. Debemos discrepar de la apatía. Debemos discrepar del miedo, el odio y la desconfianza”.

Rechazar el odio y la apatía es muy valioso en estos momentos, tanto dentro de los Estados Unidos como en el conjunto del planeta. Envuelto en una confrontación promovida por el fanatismo, principalmente por la derecha, pero también por el fundamentalismo de los terroristas que usan la religión musulmana para realizar acciones criminales.

Esa estúpida confrontación está llegando al genocidio en Gaza contra los palestinos. Ante eso no se vale la “neutralidad” que tiene el gobierno de AMLO. Lo mismo ante la invasión rusa a Ucrania, por un tirano criminal como Putin.

“No podemos solucionar nuestros problemas más espinosos a menos que seamos sinceros sobre lo que son, a menos que estemos dispuestos a mantener conversaciones difíciles y aceptar que hay que poner en claro la realidad. Necesitamos decir la verdad: que el racismo, el machismo, la homofobia, la transfobia y el antisemitismo existen en este país, y que necesitamos hacerles frente”.

Kamala Harris fue vice presidenta de Joe Biden y tiene responsabilidad en la política que aplicó su gobierno ante los migrantes, pero esperemos que, si triunfa aplique una política diferente, basada en las palabras que ella misma escribió:

“Necesitamos decir la verdad: que, excepto los nativos americanos, todos descendemos de personas que no nacieron en nuestras costas, independientemente de que nuestros antepasados llegaran a Estados Unidos por voluntad propia, con la esperanza de un futuro próspero; por la fuerza, en un barco de esclavos; o a la desesperada, para huir de un pasado terrible”.

Lo que ocurra en las elecciones en Estados Unidos afectará al planeta entero, pero muy específicamente a México, como ya se ve con la suspensión de la   mega inversión de 8 a 10 mil millones de dólares de la planta de TESLA en Nuevo León.

Si el próximo gobierno continúa la política de sumisión de AMLO a los Estados Unidos, habrá una crisis de dimensiones humanitarias.