Chile es un país con grandes tradiciones políticas, sociales y culturales. También fue el trágico escenario del golpe militar contra Salvador Allende. Instauró una dictadura brutal de septiembre de 1973 hasta el retorno democrático en marzo de 1990, después del triunfo del NO a Pinochet en octubre de 1988.

El Partido Comunista de Chile se fundó en enero de 1922, como sucesor del Partido Obrero Socialista. Desde entonces ha sido la fuerza mayoritaria entre los trabajadores, incluso durante los terribles años del clandestinaje en la dictadura de Pinochet.

Tengo la inmensa fortuna de haber visitado ese maravilloso país, principalmente su capital Santiago, en marzo de 1964. Hace 61 años. Fui delegado al II CLAJ, Congreso Latinoamericano de Juventudes, promovido fundamentalmente por el gobierno cubano de Fidel Castro.

“Por una circunstancia casual asistí al Congreso. Raúl Álvarez Garín me había preguntado si tenía interés en asistir, le esbocé una franca sonrisa y no oculté mi emoción, le contesté con una afirmación. Raúl prosiguió: “El problema es que no tenemos ni un quinto para pagar el boleto de avión”; le respondí: “Tengo una posibilidad de pagarlo. Mi padre trabajaba en la Compañía Mexicana de Aviación y podía obtener 90 por ciento de descuento en la compra de boletos”. Así lo escribí en mi libro El Otro Camino FCE, 2006.

Más adelante escribí “Por azar, durante el vuelo de Avianca conocí a una camarada de la Juventud Comunista de Colombia, María Arango, con quien entablé una plática a lo largo del viaje. Así supe de la experiencia de la autodefensa, en realidad de grupos de auto defensa armada y del liderazgo de Tirofijo, quien es hoy el guerrillero más viejo del mundo, aún alzado en armas. Manuel Marulanda Vélez, alías de Pedro Antonio Marín, se había ganado el apodo porque, decía María: ‘Donde pone el ojo pone la bala’. Tirofijo había sido el apodo de un luchador comunista que murió en Medellín en 1951. Las guerrillas de autodefensa sufrieron duros ataques por parte del Batallón Colombia en 1964, Manuel Marulanda y un grupo de compañeros logró sobrevivir a los embates y huir. La experiencia terminó por convertir a estos grupos en guerrillas móviles, buscando impedir los certeros ataques del ejército, y así nacieron, en 1966, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)”. Luego se convirtieron en un ejército, aliado a los Cárteles de narcos, que llegó a controlar casi la mitad del territorio en Colombia.

Chile me impresionó de manera vital: vi salir de las fábricas a los obreros manifestándose en marchas encabezadas por el Partido Comunista. Algo que me parecía fantástico. En México el PCM en esos años no pasaba de unos cuantos centenares de militantes. Además, vivíamos en la “dictadura perfecta”, para el Estado ser comunista era un delito, perseguía sus militantes con una saña increíble: Valentín Campa y Demetrio Vallejo pasaron más de 10 años en prisión por haber encabezado las huelgas ferrocarrileras de 1958-59. Obviamente el PCM no tenía registro electoral, violando la constitución tenía prohibido ejercer sus derechos políticos. Era un partido semiclandestino.

El derrocamiento del gobierno de Salvador Allende con bombardeos al Palacio de la Moneda, detenciones de miles de personas a las que tenían detenidas en las peores condiciones en el Estadio Nacional, donde torturaban a cientos o incluso los ejecutaban como el tristemente célebre caso de Víctor Jara; en una palabra, el golpe militar en Chile fue el principio de un largo período de retrocesos a nivel mundial. Aunque en nuestro continente, apenas terminó el II CLAJ, a fines marzo de 1964 fue derrocado por los militares el presidente de Brasil Joao Goulart, golpe que inició una sucesión de golpes militares en todo el continente de Iberoamérica.

La caída del Muro de Berlín y la extinción del llamado campo socialista, fortalecieron a las derechas a nivel planetario.

La tradición de luchas populares, de trabajadores, campesinos, estudiantes y otras  fuerzas, como las mujeres, configuran la parte heroica del  movimiento comunista, sin embargo los crímenes  casi genocidas de los Estados dirigidos por José Stalin,  Mao Tsé Tung, Pol Poot, la dinastía de los Castro en Cuba, Agostinho Neto en Angola, los militares que derrocaron a Ben Bella en Argelia y la complicidad de casi todos los partidos y militantes comunistas, han derivado en el viraje derechista que vivimos en el planeta.

En este escenario, tiene una gran relevancia la victoria del PC en el Frente Amplio  de Chile, dado que su candidata Jeannette Jara de origen obrero , militante desde su primera adolescencia de las Juventudes Comunistas, tiene el desafío de mantener la unidad del resto de las fuerzas  políticas y sociales del Frente Amplio, entre las que destaca el actual joven presidente  Gabriel Boric, un claro opositor a las dictaduras de Maduro en Venezuela y de Ortega en Nicaragua, surgido del movimiento estudiantil con una historia muy crítica ante el comunismo totalitario.

Además, Jeannette Jara tiene que ganar a millones de electores para derrotar a las derechas chilenas, que son muy poderosas, en las elecciones presidenciales en la primera vuelta el 16 de noviembre de 2025.

Cuando en México el gobierno de Claudia Sheinbaum avanza cada día hacia la instauración de un régimen militarizado, con cuestionamientos muy graves por los nexos de AMLO con los narcos, donde diariamente mueren decenas de personas, con hechos dramáticos como los 20 asesinados, 4 de ellos degollados y colgados en Culiacán, es muy importante la victoria de la candidata comunista Jeannette Jara en las primarias del Frente Amplio en Chile. VENGA LA ESPERANZA.