En el concierto de Alex Lora del pasado 12 de octubre en el Auditorio Nacional, arengó a la banda y les dijo: Chinguen a su madre los pinches políticos rateros, hijos de su puta madre, la gente le replicó chinguen a su madre, inmediatamente después gritó, viva la virgen de Guadalupe, Viva México, Viva México, cabrones; mientras aparecía una bandera mexicana y después la imagen de la virgen de Guadalupe. También se proyectó una especie de vitrales de iglesia que daban la impresión de estar dentro de un templo religioso. Después cantó unas rolas de letras que yo nunca había escuchado, que tenían las mismas ideas de rechazo al Gobierno y religiosas.

Conozco a Alex Lora hace 40 años, exactamente. En junio de 1985 lo invité a cerrar mi campaña como candidato a diputado por el PMT y el PSUM; no iba en las listas Plurinominales, eso fue en el cine Cosmos.

A partir de ahí surgió una amistad cercana durante varios años. Fui a muchos conciertos de Alex Lora casi siempre invitado a estar junto a él, en backstage, le dicen. Recuerdo uno inmenso. En un galerón de Pantitlán, en donde había casi tres mil personas. Lo singular es que al mismo tiempo estaba la policía montada dentro del local. Alex empezó a cantar su rola Abuso de autoridad. Que, en parte de sus letras, dice. Muchos azules en la ciudad queriendo agandallar. En ese momento pensé que se podía armar una gresca fenomenal. Los chavos estaban codo a codo entre sí y rozando a los caballos de la policía. Me puse muy nervioso y le dije a Alejandro ¿Qué vamos a hacer? Y me dijo “calma mi niño. Ahorita lo controlo, vas a ver, yo lo arreglo”. Y efectivamente, Alex tomó el micrófono y les dijo: A ver banda les gusta esa pinche música de locos. Sí, le respondían todos. ¿De veras les gusta? Sí. ¿Entonces voy a echarme otras 3 rolas? De acuerdo, sí. Terminó la tercera ronda y les dijo: En este momento, se me van a su casa tranquilos, sin pedo en este momento. Asombrosamente, los chavos salieron como corderitos tranquilos, rumbo a su casa y no pasó absolutamente nada. Una ocasión semejante le vi a hacer el mismo ejercicio en el auditorio Che Guevara de la UNAM. Alex Lora tiene un liderazgo muy impresionante que se ha preservado durante 57 años, ese liderazgo se debe a la confianza que la tiene la gente. En una ocasión cometí la imprudencia de preguntarle a Alex: ¿por qué no eres candidato de la izquierda a diputado? Me contestó: “No mi niño, si yo hago eso, la banda me mienta la madre”. E hizo bien. Se hubiera desmoronado su fortaleza. Lora no se prestaría a ser usado en una campaña anticomunista. Eso le dañaría inmensamente.

Alex llegó a ir a mi casa a una fiesta en mi departamento en Villa Olímpica donde vivo hace 40 años. Entonces mi hija les avisó a los chavos de la pandilla. Y de pronto había ahí 15 muchachos, le dijeron Alex échate una rola. Y les dijo, A ver si tienen una lira por ahí me ha hecho un palomazo. Así fue. Alex se puso a cantar, como hasta las 2:00 de la mañana.

Me invitó hace 3 años a su cumpleaños 70, en un palco del hipódromo estaba solamente Chela, su hija, otros cuates y yo, hablamos mucho rato. Y me pareció un cuate de una lucidez impresionante.

Ahora, siento que hay una tendencia en muchísima gente de desacuerdo con la 4T. Principalmente por los hechos de corrupción que han sido escandalosos como el del huachicol marino que ha llegado a casi 600 mil millones de pesos, el más grande fraude de la historia del país. En donde están involucrados dos almirantes que fueron subsecretarios, que son sobrinos del anterior secretario de la Marina y muchos oficiales más. No podía ser de otra manera, dado que se utilizaron barcos, pipas de gas, e camiones, contenedores en los puertos, se cruzaron aduanas, se registraron operaciones falsas, en fin, sólo en una operación del Estado era posible un fraude de tal magnitud.

Otro fraude igualmente escandaloso es el de Tabasco. De la denominada Barredora, donde está involucrado el antiguo jefe de policía del estado de Tabasco, cuando gobernaba Adán Augusto López. Ante todos estos hechos de evidencia de fraude, escandalosos, la presidenta no ha ordenado una investigación y siempre responde lo mismo. Sí hay denuncias, procedemos. Además de los escándalos de fraude, hay también un desacuerdo con las políticas de este Gobierno. En estos días se agudizó el rechazo a la presidenta por su comportamiento ante las inundaciones en Veracruz, en Tamaulipas y en Hidalgo.  En una de las manifestaciones espontáneas a la presidenta, la gente estaba indignada por que sus familiares ahogados, desaparecidos y nadie había acudido a rescatarlos, sus muebles estaban en medio de las aguas negras y la presidenta sólo acertaba hacer señales tapándose la boca o los oídos simulando que no escuchaba. Finalmente se fue y dejó a la gente ahí.

Todo esto está produciendo un desacuerdo muy grande. Desgraciadamente, la campaña anticomunista que promueve el magnate Ricardo Salinas Pliego contra lo que él llama los “gobiernícolas”, omitiendo que él es un beneficiario de esos “gobiernícolas” que le dieron el Canal 13 de Imevisión ahora de TV Azteca y que también el presidente López Obrador le dio la cartera a sus banco Azteca para manejar ahí los cientos de miles de millones destinados a los llamados programas sociales, por solos esas operaciones obtuvo más de un billón de pesos Salinas Pliego. También le perdonó durante años un adeudo con el SAT de varios miles de millones de pesos y un buen día decidió que se los tenía que cobrar. Nadie explica por qué dejó de cobrárselos cuando se vencían. Ahora está ese litigio en manos de la Suprema Corte, dominada por la Presidenta, seguramente actuará en lo oscurito negociando con Salinas Pliego, a quien algunos proponen sea postulado como candidato a la Presidencia de la República con un discurso muy anticomunista. Que considera al Gobierno de la 4T comunista y que hay que acabar con él porque nos va a llevar a hacer una Venezuela o una Cuba. Mucha gente ha comprado ese discurso. Y considera que hay que votar contra el comunismo de la 4T.

Ese voto lo representaría muy bien Salinas Pliego o alguna de sus voceras como lo es Lilly Téllez. Ese panorama de que la derecha capture el desacuerdo, que no puede recoger ya el viejo PRIAN, es decir, Morena y sus aliados, ni tampoco los pequeños grupúsculos que actúan en el movimiento social.

Se Puede consumar el viraje. El péndulo se decía antes de lo que hoy es la 4T, que es una derecha enmascarada hacia un triunfo de la Ultraderecha. Esa es la terrible expectativa que tenemos en este momento, en este país tan atribulado.