La impunidad mata jesuitas
La política de “abrazos no balazos” tiene al país rendido al crimen. Ha sido el presidente –y nadie más– quien ha empoderado a los delincuentes. Les ha entregado licencia, sin límites, para matar.
La política de “abrazos no balazos” tiene al país rendido al crimen. Ha sido el presidente –y nadie más– quien ha empoderado a los delincuentes. Les ha entregado licencia, sin límites, para matar.