Rehabilitar la política desde la sociedad
Algunos ciudadanos han comprendido que transformar el sistema ya no está en manos de los políticos tradicionales.
Algunos ciudadanos han comprendido que transformar el sistema ya no está en manos de los políticos tradicionales.
El primer golpe en la riña entre priistas y perredistas en la delegación Cuajimalpa de la Ciudad de México se asestó a la confianza ciudadana. Se trató, sobre todo, de una agresión al electorado que vio atropellado su derecho a vivir un proceso electoral pacífico, legal y propositivo.
Tal pareciera que las campañas electorales están diseñadas no para generar participación ciudadana, sino para inhibirla. A más de uno de los partidos tradicionales ha de convenir sembrar la apatía y la desesperanza, la desconfianza y la abulia, pues han hecho del proceso electoral una guerra de lodo en la que todo nuestro sistema de representación democrática resulta manchado.
Cada vez es más evidente el quebranto ético del mal llamado Partido Humanista. Por dar solo algunos ejemplos, recientemente su delegado nacional Héctor Castro afirmó que a su abanderado por la gubernatura de Sonora “ni en foto lo conocemos”; hay allí una candidatura fantasma con todas las implicaciones políticas y legales que ello tiene.
La fuerza de todo partido está no en su ideología o en sus colores, sino en su arraigo en la sociedad y en la calidad —que no la cantidad— de sus militantes. De allí que la desbandada del Partido Acción Nacional le signifique un desangramiento político que amenaza mandarlo a los últimos lugares en las elecciones de medio término.
En el zoológico del panista poblano, se encontraron 40 animales congelados.
La cancillería mexicana sólo negó lo evidente y aireó ante la comunidad internacional un tema que más le habría convenido tratar con discreción.
Arrancar una cizaña no tiene efecto cuando sus raíces siguen carcomiendo el suelo de la patria.
Si algo ha caracterizado al papa Francisco es su capacidad para enfrentar los temas sociales más delicados con valentía y sentido humano, sin prudencias acomodaticias ni oportunismos.
Entre los asesores del presidente hubo una falta de creatividad política.
Los pocos militantes que aún conserva Acción Nacional han recibido uno más de muchos golpes de parte de Felipe Calderón, quien ahora amaga con abandonar ese desvencijado partido y fundar uno nuevo.
En la carrera hacia las elecciones intermedias los partidos de reciente creación están cayendo en errores aciagos que a mediano plazo pagarán en las urnas y a corto en la arena de la opinión pública, por el repudio social que ya comienzan a ganarse debido a rencillas y prácticas autoritarias funestas, justo aquello que durante 2014 prometieron desterrar.
La más reciente visita de Felipe Calderón a Chile fue empañada no por sus dichos, sino por una de sus acciones: cenar con diversos políticos chilenos envueltos en un escándalo de corrupción, durante el “III Encuentro Internacional Oswaldo Payá: reflexiones sobre la vigencia del pensamiento humanista cristiano”.
Si Gabriel García Márquez calificaba el periodismo como “el mejor oficio del mundo”, ahora tendríamos que agregar que es, también, uno de los más peligrosos.
Primer paso para que Cuba y Estados Unidos decidan ver por encima de sus diferencias.
Impulsará hombres y mujeres sin militancia, pero con arraigo y prestigio entre sus comunidades.
La renuncia de Cuauhtémoc Cárdenas a su militancia en el PRD trascendió a los medios de comunicación y el llamado círculo rojo para convertirse en una noticia con impacto social genuino: según una encuesta, por lo menos 8 de cada diez mexicanos se enteraron de su decisión.
Quienes luchamos desde diversas trincheras en las décadas de la llamada “transición a la democracia” siempre vimos en los instrumentos cívicos un ideal a perseguir: el plebiscito, el referéndum, las consultas y, sobre todo, las candidaturas ciudadanas.
La desconfianza ciudadana en las policías locales se ahonda día con día, ensanchando la brecha que separa a autoridades y ciudadanos. Según un estudio del Instituto de Estadística y Geografía (Inegi), casi un 70% de los encuestados considera “poco” o “nada efectivo” el desempeño de las policías municipales y estatales.
Allí está el camino Manuel Espino El mito del joven mexicano apático, despolitizado y desinformado se derrumbó en el Día de Acción Global por Ayotzinapa. Aunque los números varían, tenemos certeza de que al menos un centenar de universidades y algunos centros de educación media se sumaron a un paro de impacto nacional. Universidades públicas Seguir Leyendo