Patrioterismo ramplón: Nació podrido el segundo piso
Esa interrogante no está generada por mí; la pusieron a la consideración pública estas dos damas, la primera como presidente de México y, la segunda, como senadora de la república.
Esa interrogante no está generada por mí; la pusieron a la consideración pública estas dos damas, la primera como presidente de México y, la segunda, como senadora de la república.
Hasta 70 jefes de Estado y Gobierno se reunieron en París en conmemoración del final de la Primera Guerra Mundial.
Los mexicanos nos identificamos en el pozole, las quesadillas, los moles, los chiles rellenos, los buñuelos y el tequila o en la música con los sones del mariachi.
Los himnos y las banderas ayudan a imponer la ficción de que los súbditos de un nuevo centro de poder son de hecho una antiquísima nación que logra, por fin, constituirse como Estado.
Por eso, aplaudo las iniciativas de reformar la Constitución que llevan a cabo diversas agrupaciones ciudadanas, como la realizada por La Constituyente Ciudadana y Popular.
En la entraña misma de nuestra historia y de nuestra nacionalidad se encuentran elementos para darle un mejor rumbo a la nación.