2020 un año difícil de olvidar
La pandemia nos confronta contra nosotros mismos sobre lo que somos, lo que creemos en casi todos los aspectos, como trabajamos, nos relacionamos y nos cuidamos.
La pandemia nos confronta contra nosotros mismos sobre lo que somos, lo que creemos en casi todos los aspectos, como trabajamos, nos relacionamos y nos cuidamos.
Ser y tiempo es uno de los libros de filósofo alemán Martín Heidegger (1889-1976); y, somos, como partes del “dasein” (concepto alemán clave en su obra), una materia que piensa, percibe y usa, el tiempo, como la característica más importante del ser-ahí, ser aquí y ser por doquier.
Así lo informó el propio TEPJF mediante un boletín de prensa publicado el 23 de diciembre y al cual anexaron la sentencia con engrose respectivo.
En otras palabras, se trata de una simulación, cuyo objetivo es eludir los derechos de los trabajadores, así como las obligaciones fiscales.
Ahora hay un proyecto que favorece a los sectores más atrasados y da opciones a los más acomodados. Son jóvenes, adultos mayores, la fuerza de las mujeres, niños, jóvenes y grupos más rezagados por su vulnerabilidad.
Pero, ¿qué argumento –me pregunto– que no se haya utilizado antes se puede esgrimir en contra del discurso populista de estos iluminados? A lo largo de la historia podemos encontrar miles.
El comunicado dado a conocer por un carismático encapuchado que se apodero del vértice mediático como no sucedía desde el Che Guevara, retrotraía en el tiempo a los movimientos guerrilleros de los sesenta a los ochenta.
En el arranque de la crisis sanitaria, la Secretaría de Educación Pública actuó con rapidez; decretó el cierre de escuelas; un propósito era claro: proteger la salud y la vida de estudiantes, maestros y familias.
La pandemia ha conmocionado al mundo entero, su propagación envolvió rápidamente todos los rincones del orbe con grandes consecuencias, el dialogo entre naciones, el cierre de fronteras, la ayuda humanitaria y la carrera por obtener la vacuna.
Pensar que es la voluntad de Dios, o el destino o Bill Gates o los judíos o tantos otros complots nos permite evadir toda responsabilidad, y de esa manera no nos culpamos.
Indudablemente, algo que se debe fortalecer en todo el mundo y, especialmente en México, son las instituciones, porque solo con ellas se podrá garantizar la democracia y la libertad de las personas.
Invoco —con ingenuidad— la posibilidad de gozar de una “tregua” en nuestra tierra y en nuestras vidas: tierra y vidas de ciento treinta millones de mexicanos, sobre los que se abaten muchos males, agravados por carencias.
Es común abrir un espacio para la reflexión, el balance de lo sucedido en la vida de las personas, los alcances o insuficiencias en el tránsito por el planeta, la nostalgia hace que los recuerdos afloren y doten una carga emotiva.
Cuando se trata de proteger ilícitos, resultaron iguales los gobernantes de Morena, los del PRI y del PAN. Como dicen las mujeres: todos los hombres son iguales. Para demostrarlo hago referencia a un caso de tantos.
Esta cuestión, cuyo proceso legislativo ha quedado en suspenso por las múltiples expresiones de preocupación sobre sus consecuencias negativas, está vinculada al establecimiento de la racionalidad legislativa más elemental.
Asimismo, es necesario reconocer la pluralidad y los consensos que hemos logrado este año para que a través de la ley haya una verdadera justicia laboral, que sea rápida, accesible y deje de haber juicios que duren años.
Lo peligroso es que en su derrota obtuvo, en números cerrados, 74 millones de votos, superado por John Biden, quien logró más de 81 millones de sufragios.
Alfonso Durazo busca una gubernatura dejando el registro histórico y creciente de asesinatos y feminicidios. La violencia fuera de control y el crimen organizado con mayor fuerza y salvajismo que antes.
En México estamos en la puerta de una tercera ola que podrá ser muy peligrosa. Nada le ha quedado al gobierno de la Ciudad de México por hacer: ha incrementado el número de pruebas, digitalizado muchos trámites.
Definitivamente esta es una era de incertidumbre, los eventos disruptivos como la pandemia que hemos vivido estarán cada vez más presentes, y habremos de tener herramientas para afrontarlos.