Fábrica de dictadores
Más nos vale a todos que el gobierno de Trump se convierta en una comedia innocua que en una inicua tragedia.
Más nos vale a todos que el gobierno de Trump se convierta en una comedia innocua que en una inicua tragedia.
Entrevista con Francisco Suárez Dávila, ex embajador y ex subsecretario de Hacienda
“No son más allá de meras especulaciones. Pero no hay absolutamente nada en términos de una tarea confiada al doctor Videgaray”, enfatizó Peña Nieto.
Un elemento para entender el triunfo de Donald Trump en la pasada elección presidencial en Estados Unidos, es el que aborda quienes fueron sus votantes.
El legislador estadounidense reconoció los esfuerzos que ha hecho el gobierno mexicano para mantener segura la frontera.
The New York Times no reportó que se hubieran abordado temas como la revisión de tratados comerciales, migración o la propuesta de cobrar por la defensa a las naciones europeas integrantes de la OTAN.
En una entrevista con The Brody File, él se declaró religioso a toda costa y se comprometió a darle mayor poder a su iglesia
En la mayoría de los medios de comunicación tradicionales, hay voces que se repiten, que pronostican que después del Brexit y del resultado electoral en Estados Unidos, seguirá la radicalización en Europa.
Tanto el descenso de las remesas como la fuga de capitales inciden de inmediato en la devaluación del peso.
Queremos un gobierno que le plante cara al nuevo mandatario estadunidense, no que quiera ser su amigo.
Muchos votantes norteamericanos optaron por despreciar la inteligencia para elegir a un miserable.
Los mexicanos han aportado territorio, mano de obra, recursos naturales y talento, para la grandeza americana.
Las relaciones van a sufrir cambios, lo que nos permite –dentro de las posibilidades— tomar algunas precauciones.
Lo señaló Barack Obama: Hillary Clinton tenía toda la capacidad y experiencia para gobernar. De lo que se deduce que Trump no las tenía.
Las negociaciones entre naciones no son un juego de póquer abierto.
En dos meses justos, el viernes 20 de enero de 2017, tendrá lugar en Washington, a los pies del Capitolio, la ceremonia de investidura de Donald Trump.
Será necesario explorar relaciones económicas con otras naciones del mundo.
En California, el racismo y la xenofobia de Trump crearía una verdadera revolución.
Es la temporada de los gallitos de pelea, de los ultras…
Sólo queda la esperanza, engañosa quizá una vez más, de que el gran populista se convierta en otra cosa al sentarse en su trono real de la Casa Blanca.