Urge una nueva política migratoria de Estado
Tenemos en la frontera sur una sociedad dividida, los que quieren crear puentes como aquellos que quieren construir muros.
Tenemos en la frontera sur una sociedad dividida, los que quieren crear puentes como aquellos que quieren construir muros.
Somos jugadores importantes. Nadie nos regala nada.
Hay que decirle al general que los niños mexicanos no son cosas, y que su gobierno no puede pretender tratarlos como si fueran trastos infectados.
Los señores Videgaray, Gutiérrez y Mendoza tienen el gigantesco compromiso de atender una agenda que no sólo se atañe al tema migratorio.
Lo que se presenta como prudencia del gobierno mexicano es una respuesta diplomática.
Tejen y destejen verdades y mentiras para hacer prevalecer sus intereses, sin importarles el grave daño que causan.
Gracias a la iniciativa aprobada por el Senado, los “dreamers” podrán revalidar sus estudios en México más fácilmente.
El embajador Gerónimo Gutiérrez tiene el reto de contribuir a la coordinación de los apoyos de la red consular, de las organizaciones de defensa de derechos de los migrantes y de los despachos de abogados defensores de migrantes.
La defensa de nuestros paisanos requiere acciones contundentes, no discursos ni fotos en la frontera.
Se alienta la unificación porque finalmente antes de las creencias, ideologías o condición social somos mexicanos.
Las remesas que recibe México representan la segunda fuente de ingresos más importantes del exterior.
“Estamos todos aguantando la respiración para que no haga más tonterías de las que ya ha hecho”.
“El estatus legal de muchos migrantes debe ser regularizado por las instituciones mexicanas, como su identificación oficial”.
La filtración de información en Estados Unidos no es una novedad, es parte de una política tradicional, filtrar para saber, para ver cómo reacciona el contrincante o para debilitarlo.
El nombramiento del general Kelly tiene dedicatoria especial para México y América Latina.
Entrevista con Juan José Bremer | Exembajador de México en Estados Unidos
Con amor y respeto por México, aceptamos y admiramos lo internacional y tenemos mucho respeto por todos los pueblos de la Tierra.
Las crisis golpean de manera diferenciada a unos capitalistas y a otros, y a unos países y otros.
Debemos aceptar que los gringos no nos quieren ni a nosotros ni nuestros productos.
Pone en jaque millones de fuentes de trabajo en México y juega con el futuro de millones de mexicanos indocumentados.