¡Hay estado de Palestina!
Años después, en junio de 2000, la canciller Rosario Green, visitó Gaza y Ramala, se reunió con Yasir Arafat y le transmitió la invitación del presidente Ernesto Zedillo para que visitara México…
Años después, en junio de 2000, la canciller Rosario Green, visitó Gaza y Ramala, se reunió con Yasir Arafat y le transmitió la invitación del presidente Ernesto Zedillo para que visitara México…
En abono a esa meta, despliegan políticas exteriores acomodaticias, aislacionistas y condescendientes con los poderes hegemónicos, que solo son útiles en el corto plazo.
Al respecto, vale la pena citar una de las conocidas frases del británico estadista, escritor y pintor, Sir Winston Leonard Spencer Churchill (1874-1965): “Esto no es el fin, ni siquiera es el comienzo del final. Pero, posiblemente, sea el fin del comienzo”.
Aprovechando el asesinato de Kirk, su antiguo estratega político y figura clave en el movimiento de derecha, Steve Bannon, declaró que “Charlie Kirk es una baja de guerra. Estamos en guerra en este país”.
Para una institución religiosa como la católica, con más de dos mil años de historia, pueden ser “suficientes”; la historia cuenta que a lo largo de los siglos los fieles han demostrado su fe de diversas formas, en infinidad de casos verdaderamente extraordinarias.
Ciertamente, la apuesta internacionalista ya no es la primera opción. La buena gobernanza mundial, en los términos planteados en la Carta de la ONU, es cada vez más utópica porque no puede controlar al poder.
Lo cierto es que Putin, en la cumbre de los Estados miembros de la Organización de cooperación de Shangai (OCS), cumbre a la que me referiré más abajo, volvió a plantear el tema de la ampliación de la OTAN.
De cualquier manera, el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca ha puesto de cabeza no solo a la sociedad estadounidense, sino que, a base de órdenes ejecutivas, para gusto y disgusto de muchos…
Además, si echamos un vistazo a los comentarios de analistas y de la prensa estadounidenses y europeos al concluir la reunión, coinciden en señalar que Trump abandonó la idea de concertar un alto al fuego entre los beligerantes…
La guerra (caos) es justa si observa normas y reglas de validez universal y cuando quien la ejerce es su víctima. Por el contrario, si la emprenden actores poderosos, estos la justifican como recurso para alcanzar objetivos acordes con sus intereses.
Llama la atención que algunas de estas naciones podrían ser antípodas como Estados Unidos de América (EUA) —que algún día fue paradigma de la democracia en el mundo— y Venezuela, codiciada por propios y extraños por su riqueza petrolera.
En Bolivia, como en muchos otros países las encuestas no son de fiar, porque suelen dejar de lado un voto que es clave en la nación andina: el rural. Otro factor a tomar en cuenta es la cantidad de indecisos, que suele llegar al 30 por ciento.
De entrada, ya al tema de este artículo, me refiero a uno de los últimos comentarios de Donald Trump sobre América Latina, que menciona incluso a México, como objeto de intervención militar estadounidense…
La citada doble perspectiva existe hoy en la Organización de Naciones Unidas, la cual busca conciliar paz con guerra, cooperación con conflicto y seguridad militar con aquella multidimensional y sostenible.
Ante este terrible panorama, gran parte de la comunidad internacional ha reaccionado con indignación y pide en la ONU y directamente al gobierno israelí que cese la guerra inmediatamente…
La última fase de este enfrentamiento se inició el 7 de octubre de 2023, como reacción de legítima defensa a los atentados terroristas de Hamas contra Israel que en un solo día sufrió más de 1,200 muertos y alrededor de 250 rehenes…
Dicho modelo, conocido en la teoría de las relaciones internacionales como realismo contingente, privilegia la acción cooperativa por encima de la competitiva…
El mandatario estadounidense, que no es la única, aunque sí la principal personificación del Estado Paralelo, está incendiando el escenario internacional con múltiples acciones…
Las consecuencias de esta guerra en la Franja son incalculables. Y el morbo de cada bando las vuelven increíbles. Juego macabro que poco ayuda para que el conflicto llegue a su fin. Desafortunadamente.
De hecho, en el regreso del magnate a la presidencia se difuminó la separación entre el poder político y la avidez económica privada, ni como barrera ética ni como prohibición constitucional.