En el caso de Artemis 1, como sucedió con las primeras misiones Apolo, se trata de empezar a probar los sistemas de lanzamiento, navegación y confiabilidad de los equipos instalados en la nave que servirá para alunizar, además del cohete Space Launch System (SLS) que servirá para poner en órbita y viajar a la Luna a todo el complejo diseñado para alcanzar este objetivo.
Así, es muy probable que pronto se informe del hallazgo, que por supuesto dejará insatisfechos a muchos, porque cuando se refieren a este tipo de noticias, piensan en una forma de vida inteligente.
Desde luego que a mayor distancia, sería aún más grande el tiempo necesario para alcanzar otros planetas o sistemas estelares.
Por eso la relevancia de la misión DART, que logró el 26 de septiembre de este año impactar una nave contra un asteroide para cambiar su trayectoria, con lo cual –hipotéticamente– se podría evitar su choque contra nuestro planeta.
Si bien la colonización de otros mundos –Marte y Titán en nuestro sistema solar, por citar un par de ejemplos–, es motivo de películas y novelas de ciencia ficción, es muy probable que esto se haga hasta de medio siglo, considerando que la tecnología debe avanzar rápidamente para alcanzar este tipo de metas.
El objetivo es que en la siguiente década regresen seres humanos a la Luna, con el fin de establecer una base permanente que ayude a cumplir con la siguiente meta, visitar Marte con otra tripulación humana, plan ambicioso por todo lo que implica para llevarlo a cabo.
Ahora piensen en el valor de las imágenes que puede captar objetos situados a miles de millones de años luz, algo que representa viajar por el tiempo hacia atrás y poder ver como eran las galaxias o las estrellas hace miles de millones de años.
Pero se trata de una visión que parte de la ignorancia acerca de lo que han representado los distinto programas espaciales de varios países y sus aportes a la vida cotidiana.
Pero la verdadera obsesión no se encuentra en los planetas más cercanos a la Tierra en nuestro Sistema Solar, sino en visitar otros mundos más lejanos, el problema es que no hemos desarrollado la tecnología necesaria para recorrer las gigantescas distancias que hay en la galaxia.
Asimismo, podemos apreciar algunos aspectos de la preparación antes del despegue y de la manera en que se daban las interacciones entre los astronautas y algunos aspectos de la plataforma de lanzamiento.
Así, la espera para que termine la calibración de los instrumentos a bordo del James Web ha valido la pena, pues esta primera imagen muestra el potencial del telescopio espacial para mostrarnos fotografías no sólo de sistemas estelares cercanos, sino también de otras galaxias.
Esto es importante para conocer más de nuestra galaxia y del universo en general, pues gracias a los datos recabados por el telescopio espacial, podremos conocer mejor como se originaron otros cuerpos celestes.
Por el momento, la solución encontrada es que los astronautas utilicen ropa de máxima absorción, o MAG por sus siglas en inglés, algo común en otras misiones.
Asimismo, la sonda Cassini nos ha permitido observar las lunas de Júpiter y próximamente mas misiones espaciales serán enviadas a explorar satélites como Europa o Ganímedes.
El empresario estadounidense y exingeniero de la NASA Dennis Tito, fue el primer turista espacial, previo pago a la Agencia Espacial Rusa de 20 millones de dólares, seguido de otras 6 personas que comparten con él una enorme fortuna y el deseo de viajar al espacio.
Luego del lanzamiento en Cabo Cañaveral el 16 de julio de 1969, para realizar el alunizaje el día 20 del mismo mes en la zona conocida como Mar de la Tranquilidad, Armstrong realizó el descenso el 21 de julio para ser el primero en poner su pie en la superficie de nuestro satélite natural.
Para los amantes del tema OVNI (siglas de Objeto Volador No Identificado), la época actual es una de mucho interés. Y es que además de los numerosos avistamientos reportados, también se han dado a conocer distintos materiales por parte de las fuerzas armadas de Estados Unidos que refuerzan las teorías acerca de que nos visitan Seguir Leyendo
Además, están los lanzamientos de las naves de Space-X que muestran las posibilidades de reutilizar los cohetes utilizados en el lanzamiento y varios planes para que sondas terrestres se acerquen a asteroides, algunas de las lunas de Júpiter y Saturno y otro tipo de exploraciones más allá de nuestro sistema solar.
La NASA publicó la imagen que acompaña a este texto en conmemoración del aniversario del telescopio espacial, que es de “AG Carinae es una de las estrellas más brillantes de la Vía Láctea. Es una variable azul luminosa muy inestable”.
Es cierto que al menos para Marte hay en curso varias misiones que podrían encontrar microorganismos y con ello comprobar que hay vida en otros planetas. Se trata de algo que no es posible negar, aunque si lo que muchos entusiastas de este tema quisieran saber es la existencia de vida en otros planetas, pero con un grado de avance tecnológico que les permita el viaje por el espacio, con todo lo que esto implica.
