López Obrador, expectativas
Son altas porque se trata de una alternancia electoral luego de que tanto el PRI como el PAN no dieron los resultados esperados.
Son altas porque se trata de una alternancia electoral luego de que tanto el PRI como el PAN no dieron los resultados esperados.
La sustentación de esta propuesta y de otras similares es atender la percepción pública de que los partidos reciben enormes cantidades del erario.
Hacer eficaz el sistema penal electoral y sancionar adecuadamente las conductas ilícitas.
Es tiempo de desfacer el entuerto y restituir a la JGE la competencia que la legislación le otorga, no de repetir los errores jurisdiccionales.
Posible pérdida de registro de Nueva Alianza y Encuentro Social, como partidos políticos nacionales, lo cual es causa de disolución del partido.
Probablemente perderán su registro organizaciones como el Panal y el PES. Y difícilmente serán de utilidad para el PRI las alianzas con el PVEM.
El mensaje del electorado fue un golpe muy duro que obliga a reaccionar.
Tatiana Clouthier, coordinadora de la campaña de AMLO, festejó la iniciativa de los diputados de Morena.
La simulación ha sido un problema endémico, aunque el tricolor tiene una oportunidad para refundarse; es la hora cero.
Las urnas simplemente fueron un eco del hartazgo, del repudio y a la vez de la esperanza.
Hoy el PRI es una fuerza prescindible para el nuevo gobierno.
No podíamos esperar de nuestra clase política lo contrario, la mentira y la diatriba son su sello característico.
Es el ciudadano el que pierde debido al desdén ante la corrupción.
Joven millennial: Meade es el candidato más honesto, pero no voy a votar por él porque representa al PRI… Abuelo sabio: el PRI siempre ha sido moldeable a imagen y semejanza del presidente en turno.
Hace unas décadas, el voto de los ciudadanos estaba dirigido a que fuera un partido político el que ganara.
Son muchos los pendientes aunque también resulta abundante la demagogia.
Nada es más peligroso para los pueblos que las fantasías de sus líderes políticos, porque esas fantasías fácilmente se convierten en pesadillas.
Sería conveniente que cada partido diera a conocer cuándo y cuánto está dispuesto a pagar por cada voto.
Poco importa la ideología, los principios, los valores, las convicciones, la militancia; lo importante es conseguir una candidatura.
La ambición, el colaboracionismo con el actual régimen y la mezquindad han dejado ajada su estructura.