Los buenos y los malos
Los malos del gabinete son encabezados por la secretaria de Energía, Rocío Nahle, a quien el propio presidente tuvo que salir a salvar en varias ocasiones.
Los malos del gabinete son encabezados por la secretaria de Energía, Rocío Nahle, a quien el propio presidente tuvo que salir a salvar en varias ocasiones.
Estuvo tan mal hecha la jugarreta, que varios de los integrantes de la presunta conjura se deslindaron de inmediato de esa horrible ocurrencia.
Las consultas de López Obrador seguramente seguirán realizándose hasta que se lleguen los tiempos de hacerlas sobre la pertinencia de su reelección.
¿Se habrá dado cuenta Bartlett de que, si no lleva hasta sus últimas consecuencias la investigación sobre Téllez, dejará en ridículo a su jefe, el presidente de la república?
Un acto de discriminación institucional que afecta a los niños más pobres y lesiona los derechos conquistados por las mujeres.
En unos días veremos si la denuncia en contra de Romero Deschamps prosperará o se quedarán solo con las buenas intenciones.
En México operan redes criminales que se han instalado en comunidades en donde la minería es un modo de vida.
Es un reclamo popular que se enjuicie a Romero Deschamps como principio de la limpia que debe realizarse en Pemex.
Se ha caracterizado por ser una luchadora permanente del bienestar de los habitantes de la capital del país.
Los críticos oficiosos del priismo van a utilizar cualquier error o tropezón del Presidente para criticarlo.
El gobierno mexicano deberá replantear sus acciones y estrategias de política exterior, y fortalecer el papel de Jacobson.
La resaca del IV Informe de Gobierno: si el panorama económico no mejora, el PRI estará en condiciones de desventaja ante sus adversarios.
En Palacio Nacional, casi sin oposición o con una oposición muy domesticada, el mandatario da lectura de una versión simplificada.
Quien quiera ser el próximo presidente de México, debe actuar con el ejemplo.
Experto en el trabajo sucio de la política así como en la fructífera práctica de agenciarse dinero público.
Limita sus carreras profesionales, difícil de traspasar y que les impide seguir avanzando.
La muerte sistemática de presidentes municipales es el reflejo de una sociedad enferma que necesita ser resanada desde la raíz.
De lo contrario, estaremos en un caso tan demagógico y reprochable como el de López Portillo en 1982.
El partido de Enrique Peña Nieto ha entendido que necesita nuevas generaciones.
Que se haga la ley, pero en los bueyes de mi compadre.