Hace tiempo que está registrado en nuestra sociedad el mensaje más claro: las normas -desde luego las constitucionales- no atan ni limitan al inquilino de Palacio Nacional, porque su mandato popular está por encima de esas disposiciones.
El debate consecuente se ha agudizado en la presente centuria, particularmente por la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública, por cierto con muy pobres resultados.
Mucho se ha dicho y escrito de nuestra constitución, pero, estamos enterados de ¿quien la emite? ¿qué tipo de normas contiene? ¿Por qué se le denomina norma jurídica fundamental?
Este Acuerdo debe inscribirse necesariamente en la también inconstitucional asignación de distintos proyectos y obras de infraestructura a las Fuerzas Armadas, pues en tiempos de paz no pueden realizar tareas que no se vinculen directamente con la disciplina militar.
“Siempre me ha parecido congruente en razón de que las decisiones o bien la conducción del poder no se acomoda a lo que él considera constitucionalmente válido”.
La parte más lamentable y peligrosa dentro de esta emergencia nacional está en la presidencia de la Corte. Un ministro, Arturo Zaldívar, que ha aceptado convertir al Poder Judicial en cómplice de un proyecto político autoritario.
La lectura con ojos del pasado no sirve absolutamente para nada. Efectivamente, es una rebelión contra la desigualdad, es una rebelión contra un modelo llamado neoliberal, pero es eso y mucho más.
El régimen normativo de la consulta popular torna casi imposible su celebración, previa convocatoria publicada en el DOF; por ende, su institución resulta inútil, ineficaz, social, jurídica y políticamente.
Derechos universales, derechos irrenunciables… no podemos renunciar a ellos ni siquiera por propia voluntad.
La lucha por el poder o la transformación equilibrada de instituciones sólidas; entre la creación de reglas federalistas o una nueva dictadura.
Una institución que no debe faltar en una democracia es la revocación de mandato.
En una situación inédita, el Pleno de la Corte determinó escindir la materia de estudio de las referidas acciones de inconstitucionalidad.
Nadie duda de la legitimidad de López Obrador, de su poder enorme en la nueva Legislatura y de su terca decisión de hacer las cosas como él cree que están bien hechas.
Hoy más que nunca el nuevo gobierno tiene una gran responsabilidad con los mexicanos.
Pareciera que lo único que se intenta es resguardar los pesos y centavos que ganan los jueces, mas no la independencia y autonomía.
El juez, como garante del imperio del orden jurídico, requiere garantía de respeto a su independencia.
Al triunfo de la Revolución Cubana se decretó la Ley Fundamental, que en lo esencial se apoyó en la Constitución de 1940, aunque tuvo continuas transformaciones sustanciales.
La responsabilidad de configurar un pensamiento que nos lleve a contar con una dirección hacia el futuro es de la sociedad civil.
El sistema federal es el que ha prevalecido en el transcurso de la historia de México independiente, solo interrumpido durante un decenio (1836-1846).
En este proceso de reformas algunas han salido bien y otras no, tanto por problemas de diseño como de instrumentación.
